MAR, absuelto por decir que la policía de Madrid es “la más chula del mundo”

Insultar a la policía municipal sale gratis. La última prueba ha sido la del que fuera secretario de Estado de Comunicación con José María Aznar, Miguel Ángel Rodríguez, que acaba de ser absuelto de un delito de injurias graves por decir en un programa de televisión que “la policía de Madrid es la más chula del mundo”. Esta sentencia, a la que ha tenido acceso El Confidencial, viene días después de que la presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre, se diera a la fuga de este cuerpo al intentar multarla por estacionar en un carril bus, lo que ella después calificó como un acto de machismo. Es más, el juez acaba de decidir que únicamente será enjuiciada por una falta y no por un delito de desobediencia.

Ahora, el Juzgado de lo Penal número 5 de Móstoles absuelve a Miguel Ángel Rodríguez porque no ha injuriado como tal a la institución, aunque reconoce que sus palabras fueron “injustas, desafortunadas y ofensivas”, en contra de la acusación de los sindicatos policiales –entre ellos UPM y CPPM–, que le reclamaban una multa de 60.000 euros. Aun así, el magistrado declara de oficio las costas “pues no se aprecia en las acusaciones mala fe ni temeridad que justifique la imposición de las costas”.

El juez recuerda que el propio acusado reconoció en el juicio que debería haber utilizado otro tono, “que lo que dijo está mal, que sus palabras no fueron afortunadas, que son criticables por el tono y por el lenguaje barriobajero, que fueron un error, que sus palabras no expresaban lo que pensaba, y que se pasó de frenada”.

En esa intervención televisiva, MAR afirmó que “los policías locales y autonómicos tienen que tener para empezar la mitad del sueldo, la mitad de medios, y después un respeto al ciudadano que no tienen. Y ahora, por favor, que anoten mi coche y me pongan las multas que les dé la gana”. Y añadió: “Encima se ponen chulos, que es que parece que son algo, y dices oye, pero si tú eres policía municipal”.

“Una crítica política con expresiones ofensivas”

Según aclara el juez, en las expresiones del acusado no se imputa a la Policía Local la realización de “conductas humillantes para las personas o comportamientos lesivos para la dignidad personal de los ciudadanos, ni se les atribuyen prácticas lesivas de los derechos fundamentales”. Lo que hace Rodríguez –a quien se le retiró el carné de conducir tras una prueba de alcoholemia en la que cuadruplicaba la tasa permitida– es una “crítica política” al funcionamiento del cuerpo, al criticar, entre otras cosas, que dependen jerárquicamente de los alcaldes, “y en el marco de esa crítica se utilizan expresiones ofensivas para los miembros de la policía local, como ‘chulos’”.

El magistrado considera que Rodríguez matizó sus palabras en el juicio y explicó que fue un error generalizar, que no quería quitar autoridad a los agentes de la Policía y que lo que quiso decir es que hay gente que se comporta de manera poco ejemplar. “Podía haberse hecho la misma crítica sin acudir a las expresiones objeto de la causa, pero las mismas carecen de los elementos precisos para que puedan ser constitutivas de un delito”, recoge la sentencia.

Para el juez estas palabras “injustas para este juzgador y sin duda ofensivas para los miembros de la Policía Local” se hicieron en el marco de un programa de televisión donde se busca el debate y la crítica política, que no estaban preparadas y no se reiteran en el tiempo y, por tanto, no pude entenderse como injurias graves a la institución. Para los cuerpos policiales locales esta sentencia es una evidencia más, como lo ocurrido con Esperanza Aguirre, de que los políticos pueden insultar y actuar a su antojo con la policía y quedan impunes por ello.