Rajoy convoca a la dirección del PP para fijar la estrategia que evite la derrota el 25-M

El ministro de Agricultura y cabeza de lista del PP a las elecciones europeas, Miguel Arias Cañete, viaja hoy a Marruecos para participar en su último acto oficial antes de dejar el departamento y consagrarse a la campaña. En el Partido Popular esperan el relevo en el Gobierno a finales de semana, entre el jueves por la tarde y el viernes, y que Mariano Rajoy adelante o remache las claves para la movilización del partido ante los comicios en la reunión del comité ejecutivo más allá del empeño en que alcaldes y concejales convenzan a las bases electorales para que vayan a votar el 25 de mayo.

Arias Cañete ya tiene problemas esta semana para compatibilizar sus obligaciones y compromisos de ministro de Agricultura con las responsabilidades como dirigente del partido y cabeza de cartel para los próximos comicios. El ministro ha tenido que anular su previsión de inaugurar unas jornadas en Madrid sobre el lago de Sanabria para poder estar en la reunión del comité ejecutivo del PP convocada por Rajoy a la misma hora.

La dirección del partido se cita en la sede de Génova con el fin de fijar la estrategia para esos comicios decisivos, entre otras cosas, para la estabilidad del propio Ejecutivo. Si el Partido Popular pierde las próximas elecciones, aunque sea por la mínima, Rajoy sí tendría que plantearse una severa remodelación de su gabinete para darle un nuevo impulso a la legislatura. Al menos esa es la opinión asentada en fuentes del PP una vez comprobado que su jefe descarta aprovechar la salida de Arias Cañete del Gobierno para relevar a los ministros más desgastados.

“Es una baza que se tenía que guardar para el verano o para el arranque del próximo curso en septiembre por si todo sale mal”, apuntan en los citados medios. No obstante, desde el nombramiento del candidato y con las primeras encuestas en la mano, en el PP han cambiado los serios temores a perder los comicios reconocidos en enero a un optimismo que les lleva a fijarse el objetivo de alcanzar los 20 o 21 eurodiputados en las elecciones. Son sólo dos o tres menos de los obtenidos en 2009, y hasta tres o cuatro más que los socialistas.

El candidato del PP no ha renunciado a estar presente en otro acto que le tocaba inaugurar como ministro y que no le vendrá nada mal como candidato: una jornada nacional de pymes del sector agroalimentario. En la sede de Génova temen los efectos de una alta abstención en los comicios de mayo e insisten en que sólo su electorado más fiel les puede dar margen suficiente para imponerse en las urnas.

El voto más fiel, en especial el ligado al sector agrario, será fundamental a la hora de inclinar la balanza y en ese terreno en el PP consideran clave contar con un candidato de peso en el partido y con predicamento e imagen de solvencia ante esas bolsas de electores como es el caso de Arias Cañete.

El ministro de Agricultura ha querido cerrar su mandato con un viaje previsto hace tiempo al mismo país al que, fuera de la UE, se desplazó nada más llegar al cargo: Marruecos. Arias viaja al país vecino para participar en una mesa redonda en el marco de la Feria SIAM 2014 (salón internacional de la agricultura de Marruecos). De vuelta a España, todavía tiene actos previstos para el jueves, pero el viernes ya no. De ahí que en el PP esperen el relevo para antes del Consejo de Ministros del viernes sin que en las habituales quinielas internas del ministerio figuren nuevos nombres más allá de los conocidos y obvios: el de la secretaria general de Agricultura, Isabel García Tejerina, y el del secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos. En el partido prevalece la idea de que Rajoy recurrirá a alguien menos técnico y con más peso en el partido, aunque sea en el ámbito autonómico.