Rajoy cierra filas con Cañete, el candidato que el PSOE "no quería ver ni en pintura"

Cuatro semanas antes de que empiece la campaña de las elecciones europeas, el Partido Popular presentó en Toledo a todos sus candidatos y al cabeza de lista, Miguel Arias Cañete, para que diera un primer mitin en el que adelantó el eje de su discurso. “Es el momento de consolidar el cambio” o “volveremos al retroceso integral de las ideas socialistas”, sostuvo el ministro de Agricultura. Mariano Rajoy presumió de sus tiempos (“Hemos dejado lo mejor para el final”) y remachó el mismo mensaje: “Hay que elegir entre el partido de la recuperación y el que sumió a España en su depresión más grave”.

El Palacio del Congresos de Toledo acogió a los 54 integrantes de la lista arropados por medio Gobierno, los miembros del núcleo duro del marianismo del que forma parte el titular de Agricultura: Soraya Sáenz de Santamaría, Cristóbal Montoro, Ana Pastor, Fátima Báñez, Jorge Fernández Díaz y José Manuel Soria. También asistieron los principales dirigentes del aparato con la secretaria general, María Dolores de Cospedal, al frente y ejerciendo además como anfitriona en calidad de presidenta de la Junta de Castilla-La Mancha. No faltó Javier Arenas, aunque llegó tarde.

El habitual acto de unidad y exaltación del candidato con que el PP arranca sus precampañas sirvió a Arias Cañete para ensayar el discurso general de experto en materia europea con que recorrerá España hasta el 23 de mayo, y a Cospedal para resarcirse del fiasco en el proceso de elección del presidente del PP andaluz. Rajoy aprovechó por su parte para pedir al partido una movilización general, desde sus bases locales, para ganar los comicios, por supuesto, pero también para que “expliquen y vendan” a todos los españoles los frutos de los esfuerzos que ha hecho su Gobierno y los españoles para sacar a España de la crisis.

Por "una Europa más española"

“Además del mejor que podíamos elegir, es el que algunos no querían ver ni en pintura” (por Valenciano), presumió el jefe del Ejecutivo, también metido en tono mitinero al proclamar que la apuesta del PP es “una Europa más española” y contraponer a los proyectos involutivos de la extrema derecha, la extrema izquierda y los nacionalistas una UE que es “unidad e integración, el signo de los tiempos”.

Rajoy dio por hecha la victoria bajo la premisa de la movilización, pero insistió en que será imprescindible que el partido convenza a los ciudadanos de que deben ir a votar y que “los esfuerzos” que han tenido que hacer estos últimos años han merecido la pena porque llega la hora de recoger los frutos en forma de recuperación económica y crecimiento del empleo.

Arias Cañete se estrenó en la pugna en su estudiado papel de líder superexperto y superpreparado para representar los intereses de España en el Parlamento Europeo primero y luego en la Comisión para marcar diferencias con su principal adversaria: Elena Valenciano. De los demás, incluso se permitió decir que no les dedicará tiempo en su campaña porque “los pequeños” (se supone que UPyD o Vox) no cuentan para nada en la UE.

El ministro de Agricultura se aplicó el guión de Rajoy para elogiar, uno a uno, a sus compañeros de gabinete por las principales tareas que desarrollan como el control del déficit público, la reforma laboral, la del mercado energético o de la Administración. Lanzó sus primeros ataques y desprecios a los socialistas por su pasado frente a la crisis económica: “¿Dónde estaba Valenciano cuando millones de españoles perdían su puesto de trabajo, es que no le importaba entonces la pobreza infantil?”.

Arias acusó al PSOE de Zapatero de haberse olvidado de defender los intereses de España en la UE. “A nosotros nos gusta defender a España en vez de ir de amiguito bueno a bajo coste como hacían ellos”, dijo el ministro en uno de sus frases más celebradas por los asistentes al mitin.