Las sanciones a Rusia amenazan ahora al floreciente mercado inmobiliario marbellí

Marbella está muy preocupada por las sanciones que la UE pueda imponer a Rusia por el conflicto en Ucrania. La ciudad ‘vive’ los últimos años de los turistas, inversores y compradores de viviendas rusos, que han sido un balón de oxígeno para el degradado sector turístico marbellí. Sanciones sobre visados o flujos de capitales pueden acabar con esta gallina de los huevos de oro.Cualquier medida que afecte a visados, transferencias bancarias o intercambios turísticos o comerciales sería letal para un sector que, según se dibuja en los últimos indicadores, comienza a despuntar después de años fatales.

Este es uno de los principales temas que estos días se analiza en el foro organizado en el Hotel Villa Padierna con motivo del Marbella International Property Show. Hay un mercado más allá de los Urales cuya economía no muestra signos de debilidad y que ven en la Costa del Sol todo lo que echan de menos en su país: sol, seguridad jurídica, servicios y colegios para sus hijos. Es el mercado que nadie quiere perder en el sur de España.

Se venden menos casas

Inmobiliarias como Nvoga, con clientes esencialmente rusos, son conscientes de que la crisis diplomática entre la Unión Europea y Rusia ya está teniendo repercusiones en el negocio inmobiliario. Esta empresa viaja continuamente a Moscú y tiene empleados especializados en este tipo de mercado con clientes rusos.

Sergio Krupnov, que asesora a inversores procedentes de Rusia y es participante en el foro del Villa Padierna, hace hincapié en que los bancos constituyen el punto flojo en la inversión inmobiliaria. En ese sentido trazó un panorama pesimista, ya que aseguró no atisbar una resolución de este problema en el corto plazo.

Krupnov narra también la dificultad a la que se enfrentan los residentes rusos a la hora de acceder a un carné de conducir español, ya que, a diferencia de otros países procedentes de la antigua Unión Soviética, los ciudadanos rusos no tienen la posibilidad de homologar el permiso. Como en su gran mayoría se trata de personas que no han aprendido aún a hablar y leer en español, ello entraña un alto grado de dificultad, lo que disuade a muchos a la hora no solo de obtener el carné, sino de adquirir vehículos en España. El sector de los vehículos de alta gama es el más perjudicado por esta situación. Si no hay carné, no hay compra de coches.

Los rusos echan raíces

El perfil del comprador ruso ha cambiado en los últimos años. El inversor que antes venía sólo en busca de una vivienda ahora echa raíces e invierte en negocios. Según se detalló en el foro, los diferentes perfiles están más relacionados con los destinos. Hasta un máximo de 300.000 euros se ubican en la Costa Brava, y a partir de esa cantidad, en la Costa del Sol, incluidas las casas por encima de un millón o un millón y medio de euros.

Ricardo Bocanegra, especialista en asuntos de Extranjería y que en los últimos años ha visto convertirse a los residentes procedentes de Rusia en una parte fundamental de su cartera de clientes, resalta que las continuas dificultades "están aburriendo a los inversores". Este abogado está cansado de escuchar sobre el estereotipo del ruso: "El 99%de los rusos que quieren comprar una vivienda en España no vienen a blanquear nada", insiste.

La cadena de la inversión en la Costa del Sol procedente de Rusia tiene un eslabón débil: la rigidez de los bancos a la hora de aplicar la normativa sobre la prevención del blanqueo de capitales. Así como en otros países del entorno europeo la transferencia de fondos desde cuentas bancarias rusas no encuentra más que facilidades, en España la meticulosidad con que se examina cada rublo procedente de aquel país se ha convertido en una traba que ahuyenta esas inversiones hacia otros destinos en los que se aplican normas sobre blanqueo basadas en la misma directiva comunitaria.

En este sentido Ricardo Bocanegra es tajante a la hora de exponer la contradicción de las autoridades españolas. «Nos encontramos con la paradoja de que, por una parte, el Gobierno les da la oportunidad de obtener el permiso de residencia si compran inmuebles por un valor igual o superior a 500.000 euros y, por otra, los bancos les impiden hacer las transferencias por culpa de las medidas de prevención del blanqueo de capitales impuestas por el propio Gobierno y que a veces son de imposible cumplimiento». El efecto de estas medidas, unidas a las que ahora pueda imponer la Unión Europea como sanción por la situación en Crimea, hace tambalearse este mercado.

Saltan las alarmas

En Marbella saltan las alarmas. El último año la llegada de turistas rusos al municipio se incrementó un 40%entre mayo y agosto respecto al mismo período en 2012. En esta misma línea de crecimiento,los últimos datos sobre transacciones inmobiliarias difundidos por el Ministerio de Fomento revelan que Marbella es la ciudad de España donde más ha crecido el número de operaciones, un 23,6%, en una estadística en la que se incluyen todas las capitales de provincia y ciudades con más de 100.000 habitantes.

Todos son conscientes de que el dato de que Marbella es el municipio donde más crece la venta de viviendas en toda España ha ido aparejado al incremento de la compra del mercado ruso, una tendencia que ahora puede truncarse porque Putin puede cambiarles su suerte.