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Rajoy y Díaz obvian a Rubalcaba para escenificar su pacto contra la corrupción
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PROMETE LEALTAD Y DEFENDER A ANDALUCÍA

Rajoy y Díaz obvian a Rubalcaba para escenificar su pacto contra la corrupción

La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, ha planteado a Mariano Rajoy, la necesidad de que lidere un "acuerdo de máximos" contra la corrupción

Foto: El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, conversa con la presidenta de Andalucía, Susana Díaz. (EFE)
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, conversa con la presidenta de Andalucía, Susana Díaz. (EFE)

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, salió del Palacio de la Moncloa dispuesta a hacer tanta sombra a Alfredo Pérez Rubalcaba como había anunciado antes de entrar. Ofreció al presidente del Gobierno “cooperación y lealtad institucional, que es lo que necesitan los ciudadanos”; defendió los intereses de la comunidad que gestiona “en un proyecto común para toda España”; coincidió con Mariano Rajoy en la necesidad de un pacto contra la corrupción y adelantó sus propuestas para mejorar la ley de transparencia que se tramita en las Cortes, un texto del que se ha desmarcado el secretario general del PSOE.

Rajoy y Díaz conversaron durante algo más de hora y media sobre casi todos los asuntos de plena actualidad: de la corrupción y del desprestigio de los políticos, de la necesidad de reformar el sistema de financiación autonómica sin aceptar los límites a “la solidaridad” que defienden los nacionalistas y algún sector del PSOE, del problema del paro, de las normas de rendición de cuentas de los partidos, de las medidas de transparencia, de los fondos de liquidez autonómicos o de las inversiones para el corredor del Mediterráneo.

El guion alternó los grandes asuntos de la política nacional, de los que no hablan Rajoy y Rubalcaba, y también de los que afectan a Andalucía. Nada de federalismo asimétrico ni de reformas de la Constitución para aplacar a los independentistas catalanes como postula la dirección nacional del PSOE. Después de la entrevista, Díaz intentó no desautorizar la labor y las funciones de Rubalcaba al frente de la oposición, pero en cada cuestión de fondo, comentario o silencio contradecía la línea seguida por el secretario general de los socialistas.

placeholder Mariano rajoy y susana díaz

Si Rubalcaba lleva cuatro meses pidiendo la dimisión del presidente del Gobierno, llamándole corrupto y dando por buenas y probadas todas las acusaciones de Luis Bárcenas, Díaz destacó de entrada la cordialidad, el buen tono y la sintonía alcanzados con Rajoy. También abundó en el dato de que ambos coincidían en la urgencia de tomar medidas para atajar el nivel de desprestigio de la política y de los gobernantes alcanzado entre los ciudadanos.

La presidenta de la Junta de Andalucía no se quedó en las grandes palabras. Animó al jefe del Ejecutivo a encabezar un gran pacto contra la corrupción y explicó que desde su propia comunidad llegarán al Congreso aportaciones a la ley de transparencia y demás reformas legales para mejorar el control y las rendiciones de cuentas, como es la de suprimir los donativos privados a las formaciones políticas. El PSOE rompió las negociaciones con el Grupo Popular sobre esa ley de transparencia después de decretar la ruptura de relaciones con el Gobierno del PP.

“Yo lo que he pedido al presidente del Gobierno es que vaya a por todas, que la transparencia sea de máximos”, insistió Díaz, además de ratificarse en su idea de que el problema de la corrupción afecta a todos los partidos y ámbitos de la Administración y debe ser combatida por todos sin que se convierta en un arma arrojadiza contra el adversario. Desde las comunidades autónomas, según explicó, también se puede hacer mucho y no quiere que la futura ley nacional se quede más corta que las medidas que se pueden impulsar desde las cámaras regionales.

Díaz no quiso decir si le parecía bien o mal la insistencia de Rubalcaba de pedir la dimisión de Rajoy ni tampoco que se negara a buscar acuerdos con el Gobierno como ella sí hace. Con evasivas se refirió a las posiciones intermedias de su partido entre el desafío de los independentistas catalanes y la defensa de la Constitución que hace el PP. “Hay que buscar puntos de encuentro” para garantizar la unidad de España, dijo.

Plan de empleo para Báñez y sin versión de Moncloa

La presidenta de la Junta encontró a Rajoy con la mejor disposición ante las propuestas que le hacía, tanto en las de política nacional (las que chocan con la línea de oposición de Rubalcaba) como en las que afectan a su comunidad. El jefe del Ejecutivo quedó en remitir a la ministra de Empleo, Fátima Báñez, la petición de ayuda de Díaz para poner en marcha en Andalucía un plan especial para luchar contra el paro.

En el Palacio de la Moncloa no pudieron quedar más satisfechos al encontrar tanta sintonía con el miembro del PSOE con más poder institucional (la Junta andaluza). En las fuentes oficiales del Gobierno no se tuvieron que molestar en dar su versión sobre el desarrollo de la entrevista.

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, salió del Palacio de la Moncloa dispuesta a hacer tanta sombra a Alfredo Pérez Rubalcaba como había anunciado antes de entrar. Ofreció al presidente del Gobierno “cooperación y lealtad institucional, que es lo que necesitan los ciudadanos”; defendió los intereses de la comunidad que gestiona “en un proyecto común para toda España”; coincidió con Mariano Rajoy en la necesidad de un pacto contra la corrupción y adelantó sus propuestas para mejorar la ley de transparencia que se tramita en las Cortes, un texto del que se ha desmarcado el secretario general del PSOE.

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