La Guardia Civil golpea de nuevo la conexión de ETA con sus reclusos

La Guardia Civil ha detenido este lunes a18 miembros de la dirección de Herrira, la organización de la galaxia asociativa de la izquierda abertzale que se encarga de ofrecer apoyo a los presos de ETA. Además de las detenciones, que han tenido lugar en la sede central de la organización en Hernani (Guipúzcoa) cuando sus máximos responsables estaban celebrando una reunión y en otros puntos de la geografía vasca y navarra, también se han registrado las delegaciones de Vitoria, Bilbao y Pamplona.

La operación golpea la conexión más directa de la cúpula de ETA con sus aproximadamente 600 reclusos en un momento crítico para la banda. La organización terrorista está teniendo serios problemas para seguir imponiendo sus tesis entre su población penitenciaria por la ausencia de avances concretos en su intento de negociación con el Gobierno. El riesgo de sufrir deserciones masivas inquieta a su cúpula y, según los expertos de la lucha antiterrorista, Herrira estaba ayudando a ETA a mantener su ortodoxia dentro de las cárceles.

Su desarticulación deja en el aire la capacidad de presión de ETA sobre su colectivo más importante. En la actualidad se estima que la organización terrorista apenas cuenta con una treintena de miembros en la clandestinidad. La mayor parte de ETA está, con mucha diferencia, entre barrotes.

Sucesora de Gestoras

Herrira era en estos momentos una de las más activas de la izquierda abertzale. Se la considera sucesora directa de Gestoras Pro Amnistia y Askatasuna, dos asociaciones que fueron ilegalizadas por haber desempeñado la misma función que ahora se le imputa a Herrira: actuar de correa de transmisión entre la cúpula de ETA y sus presos.

Además de las detenciones y los registros, también se ha decretado el cierre de perfiles de 32 de Twitter y 125 de Facebook y la clausura de 38 páginas web que estaban siendo utilizados por esta organización. Asimismo, se han bloqueado sus cuentas bancarias. La operación ha sido coordinada por el magistrado de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, titular del Juzgado Central de Instrucción número 6.

La operación se produce sólo dos días de que ETA hiciera público un nuevo comunicado que no hace ninguna referencia a un plan de desarme, el próximo paso que se espera de la organización terrorista tras su declaración de alto el fuego definitivo. Al contrario, la banda asegura que no va a “renegar de su trayectoria de lucha” y pide a la sociedad vasca que presione a los Gobiernos de España y Francia para forzarlos a negociar con la organización terrorista.