Es noticia
El deterioro del Palacio del Congreso obliga a seguir las obras otro año más
  1. España
La segunda planta, inhabilitada

El deterioro del Palacio del Congreso obliga a seguir las obras otro año más

El Congreso seguirá en obras otro año más. La reparación de cubiertas (4,5 millones) ha sacado a la luz el deterioro de la estructura del Palacio

Foto:

El Congreso seguirá en obras otro año más aunque la reparación de las cubiertas y el hemiciclo, que ha costado 4,5 millones de euros con cargo a Patrimonio del Estado, concluya este mes de noviembre. Al igual que en el común de las remodelaciones domésticas, lo nuevo deja al descubierto otras averías, y ahora es la segunda planta del viejo Palacio la que precisa actuaciones urgentes ante del deterioro de la estructura de madera. Estas nuevas obras se harán a cargo del presupuesto de la Cámara Baja.

El Congreso lleva toda la etapa democrática levantando o adquiriendo edificios próximos al Palacio de la Carrera de San Jerónimo hasta completar tres ampliaciones, pero se había olvidado de revisar a fondo el estado del viejo caserón de las leyes construido entre 1843 y 1850. Las filtraciones y goteras obligaron a reconstruir y reparar las cubiertas y techado del hemiciclo; y el levantamiento de los tejados ha dejado al descubierto el pésimo estado de la estructura y la viguería.

Bajo la techumbre han aparecido restos momificados de gatos y ratas, y hasta antiguos utensilios domésticos de los tiempos en que el oficial mayor vivía en el Palacio. Lo peor es que el deterioro de las vigas de madera, afectadas por humedades y filtraciones durante décadas, amenaza toda la estructura.

La segunda planta, ya desalojada por las obras en la cubierta, corría peligro. Los despachos de la secretaría general, documentación y el registro de la Cámara, que se habían trasladado al edificio que el Congreso tiene reservado al Gobierno (Secretaría de Relaciones con las Cortes) en el número 36 de la Carrera de San Jerónimo, tendrán que prolongar su exilio otro año más.

placeholder Obras en el Palacio de Congresos. (Efe)

El Congreso cuenta ya con un informe técnico de un experto en estructuras y ahora tiene que encargar un proyecto y licitar las nuevas obras. Esta vez, en vez de a cargo de Patrimonio del Estado, se harán a expensas de los presupuestos de la propia Cámara. La remodelación no se limitará a restaurar la viguería. La Mesa del Congreso quiere aprovechar para rehabilitar también dos salas de comisiones, las llamadas Calatrava y Olózaga, y dejar una sola más grande que ya existía en la etapa de la Transición.

En fuentes parlamentarias aseguran que no tienen una idea de cuánto puede costar la reforma del próximo año. La vicepresidenta primera de la Cámara, Celia Villalobos, que se ocupa directamente de todas las obras, aseguró que este año se podrá celebrar de nuevo en el Palacio la fiesta del 6 de diciembre, Día de la Constitución, y que para entonces se habrán retirado las vallas y andamios que rodean el edificio. El año pasado la recepción correspondiente se tuvo que celebrar en el Senado y se debieron anular las tradicionales jornadas de puertas abiertas.

El Congreso seguirá en obras otro año más aunque la reparación de las cubiertas y el hemiciclo, que ha costado 4,5 millones de euros con cargo a Patrimonio del Estado, concluya este mes de noviembre. Al igual que en el común de las remodelaciones domésticas, lo nuevo deja al descubierto otras averías, y ahora es la segunda planta del viejo Palacio la que precisa actuaciones urgentes ante del deterioro de la estructura de madera. Estas nuevas obras se harán a cargo del presupuesto de la Cámara Baja.

Patrimonio Celia Villalobos
El redactor recomienda