Cospedal fabrica un modelo de autonomía 'sostenible', sin estructuras de Estado

Además, al anunciar el cierre esa Sindicaturapara que sea el máximo órgano fiscalizador del Estado, el Tribunal de Cuentas, la instancia que controle los presupuestos de la Comunidad, Cospedal se adelanta a cumplir las principales recomendaciones que el Gobierno de Mariano Rajoy incluyó en junio pasado en su propuesta de reforma de la Administración.

La secretaria general del PP levantó ampollas en la oposición socialista y hasta entre algunos barones de su propio partido con sus drásticas medidas de recorte en la asamblea autonómica, sobre todo por dejar sin sueldo fijo a la mayoría de los diputados. La Cámara con 53 parlamentarios heredada de la etapa socialista se queda en la mitad: a una horquilla de entre 25 y 35 miembros.

Sólo el PP de Madrid había planteado tal recorte (de 129 a 69), pero en el caso de Castilla-La Mancha ya es una realidad para las próximas elecciones porque la reforma se puede hacer por mayoría mientras que en Madrid (como en casi todas las demás Comunidades) se requiere el acuerdo con socialistas, nacionalistas e IU y ninguno está por la labor de perder escaños.

Las cifras de reducción del déficit avalan la política de recortes de Cospedal. Cuando llegó al poder en 2011, la comunidad de Castilla-La Mancha encabezaba con un 7,3% la lista de las más endeudadas. En sólo dos ejercicios lo ha dejado en un 1,5% y ha cumplido el objetivo exigido por el Ministerio de Hacienda.

Frente la doctrina predominante en muchas autonomías según la cual recortar en aparato político (legislativo, ejecutivo o administrativo) es “el chocolate del loro” y no merece la pena, el gobierno de Cospedal ha llevada la poda a todas las estructuras de la Comunidad. Primero redujo en un 60% el número de altos cargos (un ahorro de 10,7 millones de euros en una legislatura) y otro 40% el personal eventual (12,4 millones menos).

La reducción de diputados y salarios en el parlamento regional también tiene cifras de ahorro millonarias: 4,5 millones por acabar con las remuneraciones fijas y otros 15 millones por legislatura al quedarse en la mitad el número de representantes en la Cámara regional.

Cospedal también ha suprimido los órganos e instituciones con funciones que duplicaban las ya ejercidas por la Administración central. Es una sugerencia incluida en la propuesta de reforma general del Estado que el Gobierno aprobó en junio y que en Castilla-La Mancha ya es una realidad con los consiguientes ahorros presupuestarios. Se trata del Defensor del Pueblo de Castilla-La Mancha (8,4 millones), el Consejo Económico y Social de la región (5,2 millones), la Comisión regional de Defensa de la Competencia de Castilla-La Mancha (1,24 millones) y la Sindicatura de Cuentas (3 millones en lo que queda de legislatura).

Cierre de entes públicos y embajada

El gobierno autonómico que preside la secretaria general del PP también ha aplicado drásticos recortes en organismos y entes públicos. De los 80 que había hace tres años, al terminar el pasado año quedaban 50. Entre los suprimidos figuran el servicio público de empleo (que también se superponía con el nacional) o la oficina de representación (embajada) en Bruselas heredada del anterior ejecutivo socialista.

En la televisión autonómica, Cospedal ha reducido presupuesto y subvención pública de los 64,1 millones de 2011 a los 41 millones del ejercicio en curso, un proceso calificadode saneamiento por su gobierno con el compromiso de intentar la “gestión privada” de la mismao la privatización total si es que logran ofertas empresariales para ello.