Carromero: "Nunca me declaré culpable y recurrir la sentencia era imposible"

El dirigente de Nuevas Generaciones detenido, juzgado y condenado en Cuba por el accidente de Payá reiteró que considera “excepcional” el trabajo diplomático acometido por el Gobierno español para sacarlo de la isla por la vía de la extradición (“estoy enormemente agradecido”) y “sin pagar precio político alguno, como pretendió el régimen en un principio”. Pero insiste en que nadie puede dar el caso por cerrado y menos por el hecho de que él no recurriera la sentencia.

Carromero destacó que en el sistema judicial castrista, “que no tiene nada que ver con las garantías de una democracia”, no se puede apelar a ninguna instancia superior, que la única revisión que cabe es por defecto de forma y ante la misma instancia, con todo lo que ello conlleva. Recordó que, en su juicio, la defensa ni siquiera tuvo acceso a las pruebas ni a una copia del sumario: “Los abogados tenían que copiar a mano los documentos”.

El dirigente del Nuevas Generaciones adujo que una cosa es el contenido del vídeo que tuvo que grabar y otra su declaración ante el tribunal castrista. “Cuando empecé a manifestarme como inocente paralizaron un mes el proceso, pero nunca me reconocí culpable”.

Carromero también insistió en que el Código Penal aplicado por el régimen cubano no se puede considerar legítimo desde una óptica democrática. Defendió asimismo el derecho de la familia de Payá a intentar que la Audiencia Nacional esclarezca el caso y los datos del presunto accidente que oculta el régimen castrista. Como ejemplo de ello, resalta que un año y un mes después de la muerte del disidente la familia todavía no ha tenido acceso al informe de la autopsia de Oswaldo Payá.

El dirigente de Nuevas Generaciones hace estas aclaraciones después de que la familia del opositor haya solicitado a la Audiencia Nacional esta misma semana que llame a declarar a Carromero, el superviviente del accidente, al sueco Aron Modig y a cuatro testigos de Cuba para esclarecer la muerte del disidente el 22 de julio de 2012. El juez Eloy Velasco ha preguntado al fiscal si es competente para instruir la querella.

La acusación particular entiende que la declaración de los únicos supervivientes del accidente de tráfico, Carromero y Modig, es "pertinente" y "necesaria" para el esclarecimiento de los hechos, así como el interrogatorio de las personas con las que se comunicaron con posterioridad al "asesinato".Entre ellas, se encuentra la vicepresidenta de las Juventudes del PP Europeo, María Fuster, o los residentes en Suecia Annika Rigö y Cayetana Muriel. La querellante plantea que se les tome declaración por videoconferencia desde Suecia y recoge comunicaciones de Carromero y SMS enviados desde el teléfono de Modig, donde se apunta a un "ataque" sufrido con la embestida de otro vehículo.