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El PP contraprograma a Aznar con la reactivación de la reforma de las autonomías
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RAJOY SE REÚNE CON LOS BARONES DEL PP PARA TRATAR EL AJUSTE DEL ESTADO

El PP contraprograma a Aznar con la reactivación de la reforma de las autonomías

José María Aznar repite hoy acto público con previsibles dosis de desahogo y avisos para su sucesor, pero esta vez difícilmente eclipsará la actividad y los

Foto: El PP contraprograma a Aznar con la reactivación de la reforma de las autonomías
El PP contraprograma a Aznar con la reactivación de la reforma de las autonomías

José María Aznar repite hoy acto público con previsibles dosis de desahogo y avisos para su sucesor, pero esta vez difícilmente eclipsará la actividad y los problemas reales de Mariano Rajoy. No sólo es porque el expresidente del Gobierno dejara el listón de las críticas muy alto en la entrevista de Antena 3 o porque ningún dirigente del partido le ha secundado con su nombre y apellidos; es porque el presidente del Gobierno se enfrenta a su verdadero conflicto interno en una reunión con los ‘barones’ autonómicos del PP. Además, la dirección del partido se reactiva (o contraprograma) para ocuparse de la asignatura en que acumula más retraso: la reforma de la Administración.

Rajoy convocó hace una semana a los presidentes autonómicos del PP para poner fin al conflicto interno surgido entre ellos, y entre la mayoría de esos mismos ‘barones’ con el Gobierno, a cuenta del reparto del objetivo de déficit de los Gobiernos regionales para este ejercicio, el 1,2% apalabrado en los planes remitidos a Bruselas. Para entonces ya se sabía que Aznar acudiría al Congreso el lunes por la tarde para presentar una nueva colección de libros de la editorial de FAES, Gota a gota. Ese mismo día, en fuentes de la dirección lo que esperaban es que el expresidente saliera en televisión a defenderse de los ataques de los medios más que a meterse con Rajoy. No estaban nada informados de que fuera a lanzar una enmienda a la totalidad.

Después de la andanada han pasado cinco días y nada ha cambiado en el orden interno de la organización. Los ministros y los principales dirigentes del partido se han limitado a guardar silencio o replicar con mesura a su antiguo jefe. Tampoco los incondicionales de Aznar han dado un paso al frente hasta saber cuál es el siguiente movimiento, si es que lo hay. Sólo Alberto Ruiz-Gallardón se ha puesto de perfil.

El principal problema interno que tiene hoy Rajoy en el PP no son la discrepancia o incomprensión que plantee el exjefe del Ejecutivo, aunque sean compartidas por buena parte de la militancia y del electorado. En el ‘aparato’ del partido y en el Gobierno reconocen que “el problema de Rajoy son los ‘barones’ cansados de dos años de recortes, que llegan al ecuador de sus legislaturas y quieren tener esperanzas de seguir en el poder”.

Foto de familia con Rajoy, cierre de filas y salvar a Fabra

Los planes de la dirección del PP para la jornada son: primero, foto de familia de Rajoy con los ‘barones´ y, segundo, cierre de filas con el jefe y compromiso de reparto equitativo del déficit autonómico, pero “sin dejar a nadie atrás” (por Alberto Fabra y Ramón Luis Valcárcel). La Comunidad Valenciana y Murcia tienen unos problemas de déficit superiores a Cataluña y lo que es bueno para Madrid o Galicia es letal para ellos. 

Al mismo tiempo que Rajoy intenta cerrar esa guerra interna personalmente ha convocado una reunión en la que la dirección del partido encabezada por la secretaria general, María Dolores de Cospedal, abordará con una representación del Gobierno dirigida por la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría la gran reforma de la legislatura: la de la Administración como se denomina en genérico o, más en concreto, el ajuste del Estado de la autonomías para hacerlo económicamente sostenible y políticamente controlable.

A la reunión, que también se celebra en la sede central de Génova y que fue convocada el pasado viernes, acuden los consejeros de Presidencia de todos los Gobiernos autonómicos del PP para discutir con el equipo ministerial e institucional creado por el Ejecutivo los planes y medidas para reducir el aparato político, burocrático de las autonomías. Sáenz de Santamaría tiene de plazo hasta julio para presentar el contenido legislativo de la reforma que va a medir de verdad el proclamado ‘reformismo’ del Ejecutivo, pues pondrá a prueba la unidad y disciplina del PP y su fortaleza para vencer la oposición cerrada del resto de las formaciones políticas (excepto UPyD) a cualquier cambio que les cueste un parcela de poder o un cargo público.

El reencuentro de Aznar y Posada

En ese contexto de retos internos del PP, que ocuparán todo el interés informativo de la jornada, llegará a última hora de la tarde la presentación de los libros de FAES en el Congreso. En medios del partido se cruzan las apuestas sobre si Aznar deslizará alguna pista sobre una posible vuelta. A la mayoría le parece muy pronto. Primero tendrá que hablar Ignacio Astarloa como responsable directo de FAES y cerrará el acto, como anfitrión, el presidente de la Cámara, Jesús Posada.

La curiosidad por ver cómo se saludan y conversan ambos, el expresidente y Posada, es un ingrediente añadido para que los diputados acudan al acto. “Las cosas se van para no volver”, dijo el pasado miércoles el exministro de Aznar y hoy presidente de las Cortes con Rajoy.

José María Aznar repite hoy acto público con previsibles dosis de desahogo y avisos para su sucesor, pero esta vez difícilmente eclipsará la actividad y los problemas reales de Mariano Rajoy. No sólo es porque el expresidente del Gobierno dejara el listón de las críticas muy alto en la entrevista de Antena 3 o porque ningún dirigente del partido le ha secundado con su nombre y apellidos; es porque el presidente del Gobierno se enfrenta a su verdadero conflicto interno en una reunión con los ‘barones’ autonómicos del PP. Además, la dirección del partido se reactiva (o contraprograma) para ocuparse de la asignatura en que acumula más retraso: la reforma de la Administración.

José María Aznar Botella