Dragados culminará en 20 meses la polémica Torre Pelli sevillana

En el último semestre de 2014. Es el compromiso de Caixa Bank para culminar las obras de la Torre Pelli, el polémico rascacielos de la isla de la Cartuja (180 metros y 39 plantas) que desafía el skyline de Sevilla. Dragados, filial de ACS, será la compañía encargada de culminar estos trabajos que comienzan hoy para rematar la fachada y ultimar la arquitectura interior, instalaciones y urbanización del edificio.

Las obras del rascacielos comenzaron el 17 de julio de 2007. La fecha prevista de terminación del edificio se fijó en 2011. El expresidente de Cajasol Antonio Pulido fue quien abanderó este proyecto megalómano que costará más de 300 millones de euros. Eso sí, un informe de la consultora Deloitte de 2009 vaticinaba la creación de 4.000 empleos directos gracias a la construcción de la torre (700 puestos de trabajo entre 2013 y 2014).

El proyecto reunirá un gran contenedor: el Caixa Fórum. Esta infraestructura cultural tenía prevista su morada en las Atarazanas de Sevilla, un conjunto artístico del siglo XIII en el que La Caixa se había comprometido a invertir 350 millones de euros (20 millones en la rehabilitación).  El acuerdo se firmó en 2009 en la etapa del alcalde Alfredo Sánchez Monteseirín y la Junta de Andalucía cedía el edificio por 75 años.

El desembarco de Caixa Bank en la capital andaluza en agosto de 2012 asumiendo el rascacielos de la Torre Pelli provocó un cambio radical de postura de la entidad catalana frente al que planeaba antes de absorber Banca Cívica. Caixa Bank incumplía su compromiso con los astilleros medievales al ubicar su macroproyecto cultural en la isla sevillana de la Cartuja.

El Ayuntamiento de Sevilla y la Junta de Andalucía se negaron el pasado mes de diciembre a dejar sin contenido el histórico edificio del centro de la capital andaluza. “La dignidad, el compromiso y la legalidad no se pueden intercambiar ni con la Caixa ni con nadie. Ni Sevilla ni Andalucía pueden ser sometidas a precio alguno”, señaló el consejero de Cultura de la Junta de Andalucía, Luciano Alonso, en declaraciones a El Confidencial. “Pedimos que la Caixa rectifique, porque creemos que la ubicación de Atarazanas en el mismo corazón del patrimonio mundial lo convertiría en el mejor CaixaFórum de España; esa es la filosofía de rehabilitación de edificios históricos”, añadió Alonso.

Tres meses después, la Junta de  Andalucía se ha conformado con unas migajas: apenas 10 millones de euros para uso cultural en las Atarazanas y 200.000 euros al año. La inversión no vendrá directamente de CaixaFórum, sino de la Fundación Cajasol, ahora presidida por Pulido. En diciembre del año pasado el Gobierno andaluz y el Ayuntamiento de Sevilla le reclamaron a Caixa Bank 300 millones euros a pagar en 75 años. Ahora no plantean ninguna acción judicial.

Víctor Fernández Salinas, secretario del comité español de Icomos (dependiente de Unesco) y profesor de Geografía Humana de la Universidad de Sevilla, ya admitió a El Confidencial que el proyecto de la Torre Pelli, indultado en junio por la Unesco, resultaba “más barato que el de Atarazanas”, pero también lamentaba la “errática gestión del patrimonio de la ciudad” por parte del equipo de Monteseirín y Zoido. “Había que rellenar el edificio de alguna manera y me parece bien”. Eso sí, critica cómo con la torre “se brinda lo mejor de Sevilla a un banco”.