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No tan terminal: el etarra Bolinaga cumple 120 días de libertad en Mondragón
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ÁNGELES PEDRAZA (AVT) EXIGE SU VUELTA A LA CÁRCEL

No tan terminal: el etarra Bolinaga cumple 120 días de libertad en Mondragón

“El sanguinario asesino Bolinaga lleva 120 días en libertad humillando a las víctimas. Ya está bien”. La presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ángeles

Foto: No tan terminal: el etarra Bolinaga cumple 120 días de libertad en Mondragón
No tan terminal: el etarra Bolinaga cumple 120 días de libertad en Mondragón

“El sanguinario asesino Bolinaga lleva 120 días en libertad humillando a las víctimas. Ya está bien”. La presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ángeles Pedraza, lleva la cuenta minuciosa de los días en libertad que acumula ya el asesino de tres guardias civiles y carcelero de Ortega Lara, Iosu Uribetxeberria Bolinaga, puesto en libertad por los jueces de la Audiencia Nacional el pasado 12 de septiembre por “razones humanitarias” y por un supuesto estado de salud terminal que, 120 días después, no parece tal, como ya advirtió la forense de la Audiencia. La cabeza visible de las víctimas concluía ayer su tuit al respecto con un contundente “#BolinagaALaCarcelYa”.

Cada día que pasa, la situación del exreo, un caso que se le fue de las manos al Gobierno hasta convertirse en una patata caliente en la que todos (Ejecutivo, Fiscalía, forense y víctimas) salieron perdiendo, se convierte en un tema más sangrante, habida cuenta, sobre todo, de lo mal que han encajado las víctimas los paseos y txiquiteos de Bolinaga por su ciudad natal de Mondragón. La propia Pedraza explicó en un encuentro informal con periodistas celebrado antes de Navidad cómo este caso ha impactado de forma muy negativa en la psicología de este colectivo hasta el punto de que hasta 700 víctimas se han dado de alta en la AVT como miembros a raíz de él.

El tiempo, que da y quita razones, sigue avalando, sin embargo, las tesis que en su día expuso la forense del caso, Carmen Baena, quien desde un principio se mostró partidaria de que Bolinaga continuase su tratamiento contra el cáncer en prisión mientras no se demostrara que su estado fuese terminal. Fernando Grande-Marlaska y el resto de los miembros de la Sección Primera de la Sala de lo Penal, con Alfonso Guevara como adalid, decidieron, no obstante, ignorar sus reiterados informes y poner en libertad al etarra “por razones humanitarias” al tener una esperanza de vida inferior a un año. Como publicó El Confidencial, fuentes de la Fiscalía reconocieron entonces que tras el caso había habido “tremendas presiones”, sobre todo sobre la propia Baena, que se declaró superada por la expectación mediática generada por el caso. De hecho, los jueces ignoraron dos informes forenses en el mismo sentido que desaconsejaban liberar al carcelero de Ortega Lara.

La forense siempre creyó que no era terminal

El informe de Carmen Baena, que fue desvelado en su integridad por este diario, recogía textualmente las valoraciones de los médicos del Hospital Donostia en el que fue tratado Bolinaga. Para evitar polémicas, la forense de la Audiencia optó entonces por citar “literalmente y entrecomillados, según constan en la Historia”.

Tras su exposición detallada, la consideración médico-legal definitiva de la forense fue que “desde el punto de vista médico, procede la reevaluación del enfermo una vez que desaparezcan los efectos secundarios del tratamiento recibido para que puedan evaluarse los posibles beneficios reales de dicho tratamiento y recalcular nuevamente la mediana de supervivencia que se le puede atribuir”. “La medida del índice Karnofsky con objeto de calcular la mediana de supervivencia del enfermo –añadía- debe realizarse teniendo en cuenta exclusivamente los síntomas irreversibles debidos a su enfermedad y no los motivados por circunstancias reversibles como son los efectos secundarios de los tratamientos recibidos”.

La justicia ha decidido pasar página a este turbio asunto y la última contrariedad que ha recibido la AVT al respecto ha sido la decisión del juez Pablo Ruz de no admitir a trámite la querella presentada por la asociación por el recibimiento que Bolinaga recibió en su pueblo una vez liberado, y que pudo constituir, según la AVT, un caso de “enaltecimiento del terrorismo”. El juez argumentó que el acto no constituye delito porque tuvo un carácter “privado” y la AVT, en cambio, ha presentado un recurso de apelación al entender que el homenaje no fue un acto privado si se realizó en un bar, que es un sitio público. 

El contador de la AVT, mientras tanto, sigue escrutando los movimientos del terrorista, aunque reconocen, sin embargo, que no tienen más datos por ahora de las actividades que está llevando a cabo. 

“El sanguinario asesino Bolinaga lleva 120 días en libertad humillando a las víctimas. Ya está bien”. La presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ángeles Pedraza, lleva la cuenta minuciosa de los días en libertad que acumula ya el asesino de tres guardias civiles y carcelero de Ortega Lara, Iosu Uribetxeberria Bolinaga, puesto en libertad por los jueces de la Audiencia Nacional el pasado 12 de septiembre por “razones humanitarias” y por un supuesto estado de salud terminal que, 120 días después, no parece tal, como ya advirtió la forense de la Audiencia. La cabeza visible de las víctimas concluía ayer su tuit al respecto con un contundente “#BolinagaALaCarcelYa”.