ERC exige a CiU que convierta el ‘ICO’ catalán en un banco público

ERC ha pedido a CiU convertir el Instituto Catalán de Finanzas (ICF) en un banco público catalán, como parte del paquete de medidas económicas a las condiciona su apoyo a la investidura de Artur Mas nuevo presidente de la Generalitat y a la estabilidad del futuro gobierno catalán.

La idea, de hecho no es nueva. ERC ya presentó una proposición no de ley en este sentido en el Parlament. Pero ahora tiene posibilidades políticas de que la Generalitat impulse esta petición en el marco de un futuro pacto de apoyo a CiU. Sin embargo, la decisión final dependería del Banco de España que es quien autoriza las fichas bancarias, incluso si se produce la adquisición de una.

El plan sería que el Congreso otorgue al ICF el mismo estatus financiero que en este momento tiene el ICO, de manera que esto le permitiría, por ejemplo, acudir a las subastas del BCE en las mismas condiciones que el resto de banco, mucho más ventajosas de las que disfruta el organismo de crédito catalán.

La propuesta la tiene que tramitar el Congreso porque las competencias en este sentido son de ámbito estatal. ERC pretende imitar la banca pública que tienen algunos land alemanes. Fuentes conocedoras de los contactos de aseguran que desde CiU no se ve mal esta iniciativa, si bien es políticamente complicada porque precisa el apoyo del PP en Madrid.

Capital de sobra

El ICF cuenta con capital de sobra para tener una ficha bancaria. Según la memoria de 2011, el ICF dispone de 778 millones de recursos propios, de los que 679 millones son capital. Los resultados de ese año reflejan 4,3 millones de beneficio, el triple de lo que se consiguió en el año anterior.

El plan de ERC es utilizar el ICF para facilitar el crédito a las pymes catalanas, estranguladas por la crisis financiera y la concentración de entidades, cuyo número se ha reducido de manera drástica en Cataluña por el proceso de reestructuración.

Reactivar la economía

Equiparar el ICF con el ICO forma parte de los planes de ERC para impulsar la economía catalana. Precisamente, según fuentes cercanas a la formación que lidera Oriol Junqueras, éste es uno de los puntos débiles del pasado gobierno que hasta ahora ha estado presidiendo Artur Mas: demasiado acento en los recortes y ninguna medida de dinamización económica.

ERC planea que este banco público tenga límites: el más obvio, que no pueda financiar a partidos políticos. Pero también que tenga un consejo de administración y un equipo directivo que garantice una gestión profesional.

Esta medida sería una de las que mejor vería CiU. Sin embargo, el acuerdo en materia económica está lejos, en especial por la pretensión de ERC de que el nuevo gobierno aplique una severa subida de impuestos a bancos, grandes empresas y rentas altas para compensar parcialmente los recortes que se lleven a cabo.

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