El PNV gana las elecciones y junto a Bildu suma una amplia mayoría nacionalista

Los primeros comicios autonómicos celebrados sin ETA han dado la victoria al PNV, que junto a Bildu (segunda fuerza) suman una amplia mayoría de las fuerzas nacionalistas en la Cámara de Vitoria, mientras PSE y el PP sufren un claro retroceso, sobre todos los socialistas. Con casi el 100% de los votos escrutados, el PNV obtiene 27 escaños escaños; Bildu consigue 21; el PSE se quedaría con 16, y el PP caería hasta los 10. Ezker Batua no obtendría representación y UPyD mantiene su escaño que conquistó hace tres años.

Los nacionalistas acaparan así hasta el 70% de los escaños del parlamento; una mayoría nunca conocida en el País Vasco. No obstante, la hipótesis más probable es que Íñigo Urkullu, primer presidente del PNV que se convierte en lehendakari, opte por gobernar en solitario y busque apoyos puntuales con cualquiera de las otras tres fuerzas. La fuerte irrupción de la izquierda abertzale, que le ha disputado la hegemonía nacionalista a los peneuvistas, es el dato más relevante, junto al desplome de los partidos constitucionalistas. Si en esta legislatura sumaron 38 de los 75 escaños, los resultados les dan un máximo de 26. 

La aritmética parlamentaria permite un amplio gobierno entre PNV y Bildu, que deja a PSE y PP sin ninguna posibilidad de condicionar la política vasca durante los próximos cuatro años. Sin embargo, el miedo a ser 'fagocitado' por un socio como Bildu hace que el PNV pueda buscar los apoyos puntuales de los 16 escaños del PSE y ser así los socialistas la formación "bisagra". El PP, que esta legislatura permitió a Patxi López convertirse en el primer lehendakari no nacionalista, tras 30 años de hegemonía nacionalista, se convierte en una formación prácticamente "prescindible". Sus 10 escaños ni siquiera le dan valor político pese a que el PNV alcanza los 27 diputados. La suma de ambos no llegaría para la mayoría absoluta (38 escaños sobre 75). En cualquier otra circunstancia, su capacidad de influencia será nula. 

Íñigo Urkullu, previsible nuevo lehendakari, ha situado la crisis económica por encima de las reivindicaciones soberanistas, y en el único debate parlamentario celebrado en la campaña con los otros cinco cabezas de listas, anticipó que el PNV no se va a "tirar al monte". El discurso de PSE y PP alertando de una deriva independentista si los peneuvistas vencían no ha obtenido el resultado que buscaban ambas fuerzas. A un mes de las elecciones autonómicas catalanas, al presidente Mariano Rajoy se le abre otro frente político muy difícil de manejar.

El peneuvista Andoni Ortúzar, presidente del partido en Vizcaya, dijo tras conocer este primer sondeo que Euskadi es "claramente abertzale", pese a lo cual, concretó, el nuevo mapa político "exige acuerdos". Rebeka Ubera, candidata de EH Bildu por Guipúzcoa, manifestó que, de confirmarse los resultados, éstos "exigen claramente un cambio social". Vicente Reyes, por el PSE, dijo que "vamos a tener que hablar mucho entre todos".