Maurici Lucena, nuevo número dos del PSC por Barcelona

Ni siquiera le ha dado tiempo a actualizar la página web personal que posee en Internet. Maurici Lucena reconoce en privado que su designación como número dos del PSC por Barcelona ha sido una sorpresa para todos, incluido él mismo. Pere Navarro, el presidente de los socialistas catalanes se ha fijado en este joven pero curtido economista para reforzar su candidatura en las próximas elecciones del 25-N.

Lucena (36) encarna la apuesta tecnócrata del PSC en un momento de clara indefinición política y es el arma secreta con la que Pere Navarro quiere despejar las dudas que entraña su apuesta ideológica. Colaborador hace ya diez años del hoy conseller Andreu Mas-Colell en la Cátedra de Economía de la Universidad Pompeu y Fabra, Mauricio Lucena ha desplegado la mayor parte de su carrera profesional en Madrid.

Primero como presidente del CDTI entre los años 2004 a 2010 y después en Isdefe, la empresa de ingeniería y consultoría tecnológica dependiente del Ministerio de Defensa de la que fue primer ejecutivo hasta el pasado mes de febrero. Entre 2008 y 2010 asumió además el cargo de presidente de la Agencia Espacial Europea (ESA), nombrado por acuerdo unánime de los 17 países que conforman la zona euro.

El nuevo hombre fuerte en el área económica del PSC hizo sus pinitos en el despacho empresarial que el ex ministro Carlos Solchaga fundó junto José Aureliano Recio y el que han participado destacados altos cargos de antiguos gobiernos socialistas, como el también ministro Claudio Aranzadi. Lucena formó parte del grupo de consultores dirigido por Miguel Sebastián bajo el nombre de “Economistas 2004” que elaboró el programa económico con el que Zapatero concurrió a las elecciones de aquel año.

En su historial más reciente figura además su labor de apoyo a la ex ministra Carme Chacón, candidata del PSC por Barcelona a las elecciones generales y una de las que primero defendió las opciones de Pere Navarro como sustituto de José Montilla al frente de los socialistas catalanes.