Rajoy rechaza aún el rescate: “No tengo tomada una decisión, quiero conocer las medidas”

"No tengo tomada ninguna decisión. Quiero conocer primero cuáles son esas medidas, qué signifcarían, qué pretenden, si son adecuadas... A la vista de las circunstancia tomaremos una decisión u otra". El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha vuelto a eludir una respuesta concreta sobre la posible intervención del BCE en el mercado secundario a través de fórmulas que, sin suponer un rescate total de la economía española, acarrearían determinadas condiciones que Moncloa desconoce. Ésta ha sido una de los principales anuncios de la primera rueda de prensa de Rajoy al término de un Consejo de Ministros en sus ocho primeros meses de Gobierno. También ha dicho que no ha tomado una decisión sobre la prórroga de la ayuda de los 400 euros a los parados sin prestaciones, se ha comprometido a no tocar la partida de las pensiones el año que viene y ha exigido a los españoles su propia versión del 'sangre, sudor y lágrimas' con los ajustes y los recortes. "Pero no es una opción, no se puede hacer otra cosa".

La expectación era máxima, tras las palabras ayer de Draghi exigiendo que España e Italia pidan el rescate para que el BCE compre deuda. El presidente del Gobierno ha esquivado la respuesta concreta señalando que no ha hablado en privado con el propio Draghi y explicando que tomará una decisión al respecto cuando corresponda y cuando conozca la letra pequeña de esas posibles ayudas. Una posición idéntica a la esgrimida ayer, también en Moncloa, por el primer ministro italiano, Mario Monti, que descartó también, de forma rotunda, que Italia vaya a solicitar un rescate total. 

En su primer balance de sus ocho meses al frente del Gobierno, Rajoy ha reconocido que su gestión está llevando a la toma de decisiones impopulares, que no gustan en la calle y sobre las que la oposición nunca va a dar su consentimiento. "No son medidas amables, suponen un esfuerzo no para el Gobierno, sino para los españoles", ha explicado. "Sobre todo se puede opinar, pero créanme, no es opinable, ni discutible la necesidad imperiosa de seguir reduciendo los gastos y aumentando los ingreso y demostrar al mundo y a nuestros socios que seguimos siendo el país serio y creíble que siempre hemos sido".s".

“Gastar más de lo que se ingresa provoca lo que estamos viviendo”, ha añadido el presidente para explicar el origen de la situación económica en la que nos encontramos y que ha provocado, precisamente, la toma de esas "decisiones dolorosas", en clara referencia a los recortes en Sanidad y Educación, la subida del IVA, la supresión de la extra a los funcionarios...  Pero, ha anunciado que este camino “no es una opción, no se puede hacer otra cosa”, aunque ha dicho comprender el malestar de quienes se ven afectados de forma directa por las decisiones. "Es de puro sentido común que no podemos vivir a crédito de manera permanente y es humano, sensato y lógico que nadie quiere que le afecte personalmente. Pero el Gobierno no elude su responsabilidad y toma decisiones", ha sentenciado.. 

No concreta la prórroga de los 400 euros

Rajoy, en un discurso que pretende ser didáctico, ha hecho balance de estos primeros meses de legislatura y su planteamiento de cara al futuro, en el que “la economía es la principal preocupación de los españoles". "Nuestra mayor preocupación es la situación de más de 5 millones y medio de personas que quieren trabajar y no pueden hacerlo, sobre todo jóvenes; por las dificultades de millones de familias; el cierre de muchas empresas; la caída de la actividad económica… Esta es la vida de los españoles y la realidad de las cosas que todos los españoles conocen perfectamente” ha sentenciado Rajoy, quien, sin embargo, ha añadido que no ha tomado ninguna decisión todavía sobre la posible prórroga de la ayuda de los 400 euros a los parados sin prestaciones.

En el aspecto positivo, Rajoy ha defendido su reforma laboral y ha ido más allá, asegurando que ya está dando sus frutos como "un instrumento de primer orden para evitar la masiva destrucción de empleo en la época de vacas falcas. La mayoría de los EREs ya no son de extinción de empleo, sino de extinción temporal o de reducción de jornada. Siempre será mejor esto que la única alternativa de antes de la pérdida sin más del puesto de trabajo".

En cuanto a la UE, ha anunciado que "he remitido una carta al señor Van Rompuy y a Durao Barroso en la que fijo la posición de España sobre la unión bancaria, la unión fiscal y lo que debe hacerse en el futuro. Es una contribución. Pido que estos temas se debatan en octubre y se aprueben en el mes de diciembre, al menos, la unión bancaria".

"No prometimos milagros"

También ha pedido la comprensión de los españoles. "El Gobierno se siente comprometido con un claro mandato de los españoles: arreglar los problemas de este país. No prometemos milagros, pero cuando se hacen bien las cosas, con serenidad, constancia y perseverancia, los resultados llegan. Estoy seguro de que más pronto que tarde veremos cómo llegan esos resultados".

Previamente, el líder del PP ponía en antecedentes de la situación del país y sus causas, en cuya corrección "hemos estado trabajando en los últimos meses- ha insistido-. Hay dos cifras muy indicativas de lo que ha pasado aquí en España. En 2011 el gasto de las Administraciones Públicas fue de 91.344 millones más de lo que se ingresó, más de 15 billones de las antiguas pesetas… Y eso hay que pedirlo prestado. España y los españoles debemos fuera más de 900.000 millones de euros: las administraciones, las empresas no financieras y el sector financiero español que canaliza la deuda de las PYMES y las familias”...

Para Rajoy, “durante mucho tiempo hemos vivido pidiendo crédito y hemos gastado más de lo que ingresamos. Esta es una lección muy importante de cara al futuro: hemos vivido con demasiado crédito y ahora hay que refinanciarlo o pedirlo prestado, y eso es muy caro". A esa circunstancia ha achacado también los problemas por los que atraviesa Cataluña por la caída de ingresos y no por las deficiencias de su modelo de financiación. El presidente, sin embargo, no se ha negado a recibir al presidente Artur Mas en La Moncloa, aunque se ha mostrado poco dispuesto a negociar o tratar con él un nuevo pacto fiscal que delegue en Cataluña toda la recaudación de los impuestos. "En este momento la situación por la que atraviesa españa es al que es, lo necesario y lo imprescindible es ir todos en la misma dirección y todo lo demás no tiene mucho sentido".