El Gobierno retira tropas del Líbano, donde lleva gastados casi 1.000 millones de euros

Los problemas presupuestarios y los recortes de gasto en todos lo ámbitos del Estado llegan a las misiones en el exterior de las tropas españolas. El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha anunciado en el Congreso que antes de fin de año retirará de la operación de paz de la ONU en El Líbano (Unifil) "hasta el cincuenta por ciento de la fuerza desplegada". Después de la participación en la guerra de Afganistán (diez años de duración, 98 bajas mortales de militares y 2.200 millones de gasto), la operación en la frontera entre El Líbano e Israel es la más costosa en que están las tropas españolas. Hasta 1.100 militares han estado desplegados en la zona, ahora hay algo más de ochocientos y en el último ejercicio su mantenimiento costó 196 millones de euros.

La presencia de fuerzas españolas en El Líbano, en una proporción muy por encima de sus responsabilidades internacionales y peso militar con respecto a las grandes potencias, obedece a la decisión tomada por José Luis Rodríguez Zapatero en el verano de 2006 de ponerse al frente de la iniciativa de paz en la zona por el hecho de que estaba encabezada por Naciones Unidas. Desde entonces, España ha gastado cerca de mil millones de euros en sostener e incluso encabezar la misión de paz en la frontera de El Líbano. Un general español, Alberto Asarta, ha mandado hasta este mismo año a los 12.000 'cascos azules'.

De acuerdo con Francia e Italia, con España los países con más tropas en la frontera, el Ministerio de Defensa ha decidido reducir a la mitad las fuerzas destinadas en la zona por considerar que los objetivos están cumplidos y también porque toca ahorrar todo lo posible. En palabras de Morenés porque "la situación económica de España y especialmente del Ministerio de Defensa, y no sólo del Ministerio de Defensa, aconsejan racionalizar y priorizar al máximo todos los compromisos, también los del exterior".

Las misiones de las tropas españolas en el exterior costaron al Estado en el último ejercicio un total de 861 millones de euros. Durante la etapa de Zapatero, después de la retirada de Irak, el Gobierno socialista pasó de gastar 380 millones en las operaciones en el extranjero a elevar esa cifra año a año a tener que 'compensar' la salida de aquella misión sin pactarla con nadie con la entrada de lleno en la guerra de Afganistán y el protagonismo absoluto en Unifil porque estaba encabezada por la ONU.

Aunque la misión de las tropas españolas en Afganistán es la más cara en vidas y fondos invertidos, anticipar allí la retirada es mucho más complicado. Morenés ha destacado que la operación de la OTAN para sostener el régimen de Karzai frente a los talibanes "está sujeta a muchos más condicionantes que la de El Líbano". Pero no ha descartado que si "la situación, la seguridad de las nuestras tropas y el acuerdo con nuestros aliados lo permiten" estudiar un adelanto del calendario de salida. La previsión es hacer un repliegue escalonado que concluye en 2014. Para entonces, como adelantó El Confidencial ayer, España habrá gastado en Afganistán un mínimo de 3.000 millones de euros.