De la Serna: “Pagamos el 18% del gasto en competencias que no nos corresponden”

Íñigo de la Serna, alcalde de Santander desde 2007, fue con 36 años el primer edil más joven de España, el cuarto más votado en las últimas elecciones municipales. Entre sus prioridades están renovar Santander de cara al Mundial de Vela del 2014, y sus mayores preocupaciones son la austeridad municipal y crear más empleo. Consciente de que los ayuntamientos son la primera institución a que se dirigen los ciudadanos en busca de soluciones y ayudas, su proximidad como edil le obliga moralmente a atender todas las necesidades de sus vecinos, aunque no sean de su competencia.

“No queremos más competencias de las que ya asumimos, sino recursos para poder prestarlas con eficiencia y calidad”. De hecho, el consistorio santanderino soporta el 18% de unos gastos que no le corresponden: millones de euros en políticas sociales, de empleo y de promoción del deporte y la cultura que debería financiar el Gobierno de Cantabria y no lo hace.

En un encuentro sobre “Ciudades Inteligentes” que El Confidencial organiza con el patrocinio de Ferrovial con los principales alcaldes de España, que de forma periódica abordarán a través de este diario los principales retos de la administración local en este contexto de crisis, De la Serna aseguró que en Santander afrontan la crisis con mucha responsabilidad, controlando el gasto sin poner en peligro ninguna de las políticas sociales. Sin embargo, el alcalde denunció en la sede de este diario que los ayuntamientos, los entes que menos volumen de deuda generan tengan que afrontar las consecuencias de la mala gestión de otros.

 

Pese a la virulencia de la crisis, De la Serna ha duplicado sus esfuerzos en impulsar un ambicioso plan de inversión pública y se ha comprometido con sus vecinos a apostar por hacer de Santander una Ciudad Sostenible y un referente cultural. En el evento, De la Serna desmenuzó las características del Centro Botín, un proyecto cuyas obras están a punto de iniciarse y que supondrá la creación de “cientos” puestos de trabajo, además de una transformación de la ciudad. El alcalde se refería a que Cantabria no va a tener ninguna otra entidad cultural con el nivel de actividad y de inversión que ofrecerá, una vez que abra sus puertas en 2014, el Centro de Arte y Cultura de la Fundación Botín, que se convertirá en una “referencia nacional e internacional”.

Los 77 millones de euros que costarán su construcción, la mejora del entorno en el que se ubicará, y otros 12 millones más anuales, que se destinarán a financiar su actividad, “da una muestra del proyecto tan ambicioso que hemos puesto en marcha, desde el punto de vista cultural, artístico y didáctico”. Santiago Olivares, consejero delegado de Ferrovial Servicios, destacó en el encuentro que la tecnología bien aplicada tiene una ventaja económica “importante” y lo comparó con la ciudad de Birmingham,  un referente “a escala mundial, de eficiencia, innovación y atención ciudadana”.

De la Serna destacó que no se trata solo de que Santander contará con un edificio emblemático, el único en España de un arquitecto que se encuentra en la primera línea mundial, como es Renzo Piano, sino que va “a desarrollar una actividad que colocará al Centro Botín a la cabeza de la actividad cultural en la ciudad y en el resto de la comunidad autónoma”, subraya. El alcalde también valoró la apuesta que hará la Fundación Botín en este centro por reconocer y potenciar el talento creativo, aplicado no solo a la cultura, sino también a otros ámbitos, como la ciencia o el emprendimiento empresarial. 

Santander apuesta también por crecer gracias a la innovación. Uno de los proyectos más ambiciosos en esta materia es el denominado SmartSantander, en el que, mediante el despliegue de unos 20.000 sensores por toda la ciudad, "se pueden conocer desde los parámetros ambientales", como la calidad del aire, la temperatura o el polen, hasta dónde hay una plaza de aparcamiento libre en superficie. SmartSantander fue premiado en Budapest entre los mejores proyectos de innovación europeos.

"Una competencia, una administración"

Tras aplaudir las iniciativas ya aprobadas por el Ministerio de Hacienda para superar las dificultades financieras de los ayuntamientos, como las encaminadas al pago a proveedores o el adelanto de las liquidaciones a cuenta, De la Serna declaró a los responsables de este diario presentes en la reunión que es fundamental afrontar una reforma de la administración para hacer posible el principio de “una competencia, una administración” y que ésta sea más eficaz.

Desde que estalló la crisis, los responsables de dirigir la capital de Cantabria han adoptado medidas de ahorro en áreas como protocolo, que ha visto reducido su presupuesto en los últimos años a más de la mitad, pasando de 778.000 euros en 2007 a los 360.000 en 2011, congelación de sueldos y dietas de toda la Corporación y cargos de confianza, además de implantar un plan de ahorro energético en todos los edificios municipales.