Rajoy elude detallar qué impuestos piensa tocar para cumplir con Bruselas

Mariano Rajoy tiene en la gestión de Zapatero y sus previsiones de déficit ante Bruselas la mejor defensa ante las acusaciones de Alfredo Pérez Rubalcaba. El pasado queda tan cerca y está tan bien representado en el actual líder de la oposición que el Gobierno sólo tiene que esbozar los datos fundamentales. "Nos ha hecho mucho daño", "hemos tenido que dar muchas explicaciones" o "si el anterior Gobierno hubiera cumplido ya estaríamos en el 4,4 por ciento" fueron las frases con que el jefe del Ejecutivo ha defendido su logro de esa prórroga para este año del 5,3 por ciento del déficit pese a la "pérdida de credibilidad" que España sufrió con el PSOE ante las instancias de la Unión Europea.

Rajoy informó al Congreso sobre los resultados del último Consejo Europeo en materia de consolidación fiscal y tuvo que explicarse sobre el cambio de última hora en el objetivo de déficit público para este ejercicio impuesto por el Eurogrupo (del 5,8 por ciento previsto por el Gobierno al 5,3 final). El presidente del Gobierno dijo que había cedido por el bien del "consenso" con que se fijan previsiones y compromisos en el concierto de la UE y también tuvo que admitir que los 5.000 millones adicionales en recortes y/o aumento de la presión fiscal tendrá unos costes que eludió detallar, pese a las preguntas de varios portavoces de los grupos parlamentarios.

El núcleo del debate, que se prolongó casi cinco horas, fue un intercambio de reproches entre Rajoy y el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, sobre el origen del problema del incumplimiento del objetivo de déficit. El portavoz socialista prefería partir de cero, como si la obligación del actual Ejecutivo fuera conseguir prórrogas de tiempo y cifras sin más, e intentar que Rajoy diera pistas de cómo equilibrará ahora las cuentas. El presidente del Gobierno respondió con los datos de la herencia recibida y se guardó cualquier dato de recortes o subidas de impuestos.

"Lo más grave para España ha sido incumplir los compromisos y sostener hasta el final que se iba a cumplir con el 6 por ciento para este año", proclamó Rajoy para acusar al Ejecutivo de Zapatero de haber hecho mucho daño a los intereses nacionales con el engaño a la UE. También recordó que el PSOE permitió a las Autonomías aumentar su déficit y relajó las condiciones sobre emisión de deuda, fomentando así los desequilibrios presupuestarios. Frente a ello, el presidente del Gobierno destacó que "esto es un Estado" y el jefe del Ejecutivo tiene que hacerse responsable de la deuda y del déficit de todas las administraciones.

Rubalcaba insistió en los recortes del gasto de Defensa como solución para hacer frente al déficit pese a ser el capítulo que ya cargó con el anterior Gobierno con las reducciones más importantes, un 16 por ciento. Rajoy replicó con el recordatorio de las deudas que se ha encontrado con la industria militar (30.000 millones en cifras redondas) y acusó al jefe de la oposición de quedarse en "declaraciones grandilocuentes".

Ni el portavoz del PSOE ni los representantes de los grupos nacionalistas o de izquierda lograron que Rajoy adelantara las nuevas medidas de recorte o los impuestos que subirá el Gobierno para cubrir el medio punto de recorte de déficit adicional (5.000 millones) impuesto al final por Bruselas.