La mujer de Rubalcaba hace campaña a favor de su amigo íntimo Lissavetzky

De pocas amistades puede presumir más el candidato socialista al Ayuntamiento de Madrid que la de su íntimo colega Alfredo Pérez Rubalcaba, con quien comparte muchos años de relación desde que ambos se conocieron en su etapa universitaria. De aquella época lejana en la Facultad de Químicas en la que Jaime Lissavetzky y Rubalcaba, uña y carne, conocieron a las que hoy son sus respectivas mujeres, Pilar Goya, por parte del vicepresidente, y Pilar Tijeras, por parte del secretario de Estado. 

Ellos cuatro forman un grupito de esos de los que quedan a comer todos los domingos y que comparten vacaciones y veraneos. No es de extrañar, por tanto, que Rubalcaba y su entorno más próximo e íntimo sean también los mayores entusiastas de la difícil gesta que quiere encabezar Lissavetkzy como aspirante a la alcaldía de Madrid, territorio popular de Ruiz Gallardón. Hasta el punto de que la propia esposa de Rubalcaba, la también química Pilar Goya, ha dado un paso adelante para participar públicamente en la campaña del socialista. Un paso inédito en su carrera, en la que siempre ha querido permanecer en un segundo y discreto plano a la sombra del hoy vicepresidente del Gobierno.

Goya es una de los personas que ha decido participar en el último vídeo promocional lanzado desde el PSOE para impulsar la precampaña de Lissavetzky. Un vídeo en el que incluso se puede ver una imagen de ambos en lo que parece una estampa típica de verano junto a la playa. En él, algunos de los amigos del secretario de Estado para el Deporte han querido mostrar su cariño y apoyo con mucho sentido del humor y enseñando a escribir el raro apellido de origen ucraniano del socialista.

El vídeo, colgado ya en YouTube, forma parte de la campaña 'La clave que cambia Madrid', con la que el candidato está dando a conocer algunos de los ejes básicos de lo que será su programa electoral.

Goya explica en él que Lissavetzky “siempre está cuando se le necesita. En los momentos duros, pero en los divertidos también. Siempre puedes contar con él”. Lo dice con conocimiento de causa, pues en los últimos días de convalecencia de Rubalcaba, Lissavetzky se ha desvivido por atender a su amigo del alma y por estar pendiente de todos sus cuidados. Tal es así que hasta ha descuidado su campaña municipal durante dos días en los que ha estado completamente desaparecido. 

“No sé exactamente lo que se haría, pero estoy segura de que sería algo para todos los madrileños, tanto para los que le hayan votado, como para los que no””, explica en otro momento de su intervención. “Madrid podría ser una ciudad muy afortunada si tuviera un alcalde como Jaime”, añade”.

Todos los protagonistas del vídeo son amigos de Lissavetzky, todos ellos con un común denominador, el ser anónimos para la ciudadanía, ya que en las imágenes no aparecen ningún político ni siquiera Pérez Rubalcaba. Durante algo menos de seis minutos, tratan de deletrear de memoria el apellido de origen ucraniano del candidato, algunos con más éxito que otros. Y es que para algunos Lissavetzky se escribe con 'ch' mientras otros confunden el número de 's' o la 'y' por la 'i'. También hay quien es capaz de deletrearlo a una velocidad vertiginosa --"lo llevo haciendo 40 años", afirma una de sus amigas-- y hay quien confiesa que esto de deletrear el apellido y hacerlo deprisa, como si de un trabalenguas se tratara, es "casi un juego" que practican "de vez en cuando".

Lo que todos sus amigos tienen claro es que seria un alcalde "de puertas abiertas a la ciudadanía", que haría de Madrid una ciudad "más alegre y humana" y que "borraría el marrón de las cuentas del Ayuntamiento y la boina" de la contaminación.