Abánades liquida los activos de Rayet para evitar el concurso de acreedores

Liquidación total. El Grupo Rayet ha entregado la práctica totalidad de su patrimonio a los acreedores para evitar el concurso después de que, el pasado viernes, ambas partes llegaran a un acuerdo tras dos meses intensivos de negociaciones. Se trata de ceder inmuebles a cambio de salvar la filial Rayet Construcción.

El contenido del acuerdo al que ha llegado Félix Abánades, presidente del grupo, con los bancos y cajas consiste, básicamente, en ampliar el período de carencia de los préstamos hasta 2016, tal y como adelantó Expansión, así como conceder avales técnicos y líneas de liquidez para que la constructora pueda seguir operando. La deuda del Grupo Rayet (excluido Quabit) asciende a 430 millones de euros, que quedará reducida a algo más de 200 una vez se ejecute el plan de desinversión.

De entre los acreedores que han firmado el convenio, los más importantes son Caja Madrid-Bancaja, Banco Sabadell, Banco Popular, La Caixa, Nova Caixa Galicia y Cajastur-CCM. Gracias a este proceso de refinanciación y, por ende, a que se ha evitado el concurso, las entidades mencionadas no tendrán que provisionar.

Con el dinero obtenido, Rayet prevé acometer un Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que presumiblemente dejará la plantilla de Rayet Construcción a la mitad, y pagar a los proveedores, a los que se adeuda otros 200 millones. El convenio de acreedores financieros firmado el viernes estaba supeditado a un acuerdo previo con los no financieros. Dicho acuerdo implicaba una quita del 33%, el pago de otro 33% de la deuda al contado y la tercera parte restante en los próximos dos años. Este convenio ha sido suscrito por el 90% de los proveedores.

Venta de hoteles y de parte de Eiffage

Entre los activos más representativos cedidos a los bancos y cajas se encuentran el Hotel Selenza de Estepona de cinco estrellas, edificios en Madrid y Valladolid, terrenos en las localidades alcarreñas de Alovera y Quer, así como un porcentaje de las participaciones que mantiene en compañías cotizadas, caso de la constructora francesa Eiffage, de la que posee el 5%. Según aseguran fuentes de Rayet, también se planteó la posibilidad de incluir Quabit en el lote sin que finalmente hubiera acuerdo.   

De esta forma, Abánades consigue sacar a flote su filial Rayet Construcción, principal motivo de este proceso. El resto del grupo queda reducido a la participación en su filial inmobiliaria (Quabit, la antigua Astroc) y al Hotel Selenza de Madrid, una de las joyas del grupo alcarreño, un cinco estrellas que alberga al restaurante de Ramón Freixa (dos estrellas Michelín) y del que es probable que también se tengan que desprender para hacer caja, según barruntan en la propia compañía.