Interior tiene listos informes para prohibir el nuevo partido de la izquierda abertzale

Los servicios de información de la Policía y de la Guardia Civil han elaborado ya sendos informes para demostrar que el nuevo partido que la izquierda abertzale presentará en los próximos días con la intención de presentarse a las elecciones municipales y forales de mayo es una continuidad de la ilegalizada Batasuna, pese a que aún no se conocen ni a sus promotores ni sus estatutos.

Los informes de inteligencia se sustentan, fundamentalmente, en constatación de que han sido destacados miembros de Batasuna quienes el pasado 27 de noviembre de 2010 anunciaron en público la constitución del nuevo partido y anticiparon que cumplirá la Ley de Partidos. Entre aquellos estaba Rufi Etxeberría, en este momento su dirigente más cualificado en libertad, o el “histórico” dirigente de ETA Eugenio Etxebeste “Antxon”.

Las fuentes policiales consultadas creen que la presentación pública de la formación, que se pretende sea multitudinaria, tendrá lugar la próxima semana, como paso previo a la presentación de los estatutos en el Ministerio del Interior para su inscripción en el registro de partidos. Los mismos interlocutores manejan la hipótesis de que los estatutos recojan la condena (palabra hasta ahora tabú en la izquierda abertzale) de cualquier acción terrorista al margen de su autoría. Un dato que, de confirmarse, supondría el paso definitivo de la izquierda abertzale en su paulatino distanciamiento de ETA, ya que se obligarían a condenar un hipotético atentado.

Rechazo de la violencia.

El manifiesto “Hacia un nuevo proyecto político y organizativo”, presentado en el acto en el que se anunció la creación del nuevo partido, reiteraba la apuesta de la izquierda abertzale por las vías exclusivamente pacíficas y democráticas y el rechazo “al uso de la violencia o la amenaza de su utilización para el logro de objetivos políticos”. “No hay cabida para forma alguna de coacción violenta en la estrategia independentista y socialista de este nuevo proyecto político y organizativo”, decía uno de sus párrafos más tajantes.

“Entendemos –subrayaba el  citado documento- que solamente desde el respeto a los principios democráticos se pueden concitar mayorías institucionales y sociales”.

Una vez presentados los estatutos, el Ministerio del Interior dispone de 20 días para su inscripción. Fuentes de Interior aseguran que no se agotará el plazo y que tan pronto como se depositen en el registro se remitirán al Fiscal General del Estado por presunta ilicitud penal. Finalmente, será la Sala del 61 del Tribunal Supremo la que resuelva si el partido cumple o no los requisitos legales para su inscripción.