Aguirre hará campaña en Cataluña tras ser excluida en 2009 de Galicia y País Vasco

Esperanza Aguirre saldrá de sus dominios madrileños para ayudar en la campaña catalana a Alicia Sánchez-Camacho. Los populares han decidido enviar a toda su artillería a Cataluña para convertirse, el próximo 28 de noviembre, en la bisagra que permita a CiU recuperar la Generalitat. Un resultado que afianzaría al partido de Mariano Rajoy en esta comunidad clave de cara a las Generales, y que supondría un nuevo golpe para el debilitado PSOE.

 

La presidenta de la Comunidad de Madrid irrumpirá en la arena electoral catalana junto a Sánchez-Camacho, aunque fuentes próximas a Aguirre no pudieron precisar ni la fecha ni el formato del acto. Su visita se enmarca en la abundante presencia de líderes nacionales del PP en Cataluña desde el inicio de la precampaña, pero contrasta con la estrategia de Génova en las autonómicas de 2009. Entonces, también en comunidades con sensibilidad nacionalista, así como con perspectivas de vuelco electoral, Aguirre fue excluida de la caravana popular en Galicia y País Vasco. 

Estos comicios significaron la consolidación de Alberto Núñez Feijóo y Antonio Basagoiti, pero también del propio Rajoy, que con los críticos de su partido al acecho, apostó por la moderación y por un cambio de liderazgo frente a figuras como María San Gil. La presidenta madrileña no fue invitada a recorrer estas comunidades, aunque sí acudió el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón. La estrategia dio resultado, especialmente en Galicia, donde el PP recuperó la mayoría absoluta, pero no resulta equiparable a las características de Cataluña.

El voto no nacionalista se ha convertido en un yacimiento electoral muy competido. Las últimas encuestas reflejan que Ciudadanos resiste o aumenta su presencia en el Parlament, mientras que José Montilla ha renegado del tripartito y se esfuerza en atraer a los electores más tradicionales del PSOE. Asimismo, UPyD o la nueva formación de la ex popular Montserrat Nebrera, pese a no obtener ningún escaño, pueden arañar algunos votos determinantes. En este complejo escenario, la presencia de Aguirre puede atraer hacia el PP la bolsa de votantes que huyen de propuestas independentistas.

"El PP parte de una cota baja, y asuntos como la crisis o el hundimiento del PSC deberían catapultarles. No obstante, están demasiado preocupados intentando frenar a Ciudadanos o a Plataforma por Cataluña", señalaron fuentes cercanas al PP catalán. "La unidad del partido también se está resintiendo por la exclusión en las listas de Daniel Sirera [ex presidente de la formación en Cataluña] o Carina Mejías. Además a Alex Vidal-Quadras tampoco le llaman, pese a que consiguió los mejores resultados del PP", añadieron estas fuentes.

La inmigración, materia clave

Sánchez-Camacho ha elegido la inmigración como uno de los principales temas de campaña, tratando de cerrar el paso a Josep Anglada, el concejal de Vic que pretende dar el salto al Parlament con un discurso tachado por muchos de xenófobo. Pero no todos en el PP se sienten cómodos con la dureza exhibida por su presidenta en esta materia, en línea también con el líder popular en Badalona, Xavier García Albiol.

Por ejemplo, la estrategia de Aguirre ha sido muy diferente, y cuando cada vez más extranjeros obtienen el derecho a voto, el PP de Madrid ha seducido a buena parte de los colectivos de inmigrantes de la Comunidad. Prueba de ello fue la presencia de estas asociaciones en la reciente Convención de los populares madrileños.

Al margen de la visita de Aguirre, destaca la intensa presencia de Rajoy, que pasará una semana en Cataluña y acudirá a todas las provincias. Además, se espera la participación de Gallardón, María Dolores de Cospedal, Feijóo y Basagoiti. En cambio, José Luis Rodríguez Zapatero apenas ha confirmado tres actos de campaña, aunque, dadas las malas previsiones de las encuestas, es posible que aumente su respaldo al PSC. Junto al líder socialista, Ferraz enviará a Alfredo Pérez-Rubalcaba, Ramón Jáuregui o José Blanco. Y es que en los comicios catalanes se decide algo más que la Presidencia de la Generalitat.