Uralde presenta su nuevo partido en Bruselas de la mano del histórico Cohn-Bendit

La hoja de ruta está definida y mañana martes Juan López de Uralde dará en Bruselas un paso decisivo en la puesta en marcha de lo que aspira a ser la nueva apuesta política del ecologismo español, la plataforma que ya tiene nombre y estatutos, Fundación Equo. El bautizo contará además con un padrino de excepción, el eurodiputado francés Daniel Cohn-Bendit, conocido por su participación en Mayo del 68 y, sobre todo, por ser el impulsor de Europe Ecologie, el modelo en el que Uralde y su equipo han fijado su atención y sus aspiraciones.

 

“La rueda de prensa escenificará el respaldo de Los Verdes Europeos a la apuesta política que vamos a hacer en España”, explica Uralde a este periódico. “Es importante porque nos sentimos representados en su modelo y aspiramos a tener una presencia como la que ellos han logrado”.

Los pasos son firmes y decididos desde que, a finales de julio, López de Uralde anunció su retirada de Greenpeace España tras diez años como director ejecutivo. Tiempo en el que su rostro se convirtió en uno de los más representativos del ecologismo español, máxime después de su paso por la cárcel de Copenhague, donde permaneció 20 días encerrado tras colarse en la cena de gala de los jefes de Estado que participaron en la Cumbre del Clima de diciembre. Su salida de Greenpeace estaba meditada desde hacía tiempo y suponía el primer paso para formar en España una gran fuerza política que, como horizonte, aspira a presentarse a las próximas elecciones generales. 

Todo eso cristalizó la semana pasada con el registro en el Protectorado de Fundaciones de Equo, la fundación con la que se quiere “crear un movimiento sociopolítico para la ecología política y la equidad social” que, “si se dan las condiciones” se podría presentar a las elecciones de 2012. “El primer paso ha sido la constitución de una fundación porque consideramos que hace falta un centro de pensamiento, un think tank, que aúne la ecología política”, explica a El Confidencial, el propio Uralde. “Es un primer paso que debe servir como catalizador de todo el proceso. Necesitamos contactar con mucha gente y sondear muchas opiniones e ir tejiendo una red de contactos. El mundo verde es un mundo muy diverso, pero sabemos que la unión de todos suma mucho más que cada parte por separado”.

La rueda de prensa de Bruselas es solo el punto de partida de un proyecto que irá, poco a poco, buscando su espacio en la política española. Sin prisas, tal y como reconoce el ex director de Greenpeace, para evitar incurrir en errores del pasado. “El movimiento verde ha perdido mucha credibilidad durante los últimos años por su dispersión y por haberse ido rápidamente con unos o con otros. Tratamos de consolidar una alternativa que supere esa desconfianza y, para eso, necesitamos hacer las cosas despacio y con solidez”. 

Inquietud en el PSOE

La iniciativa cuenta también con el apoyo del diputado de ICV y candidato a la Generalitat, Joan Herrera, que podría hacer pública la adhesión de su partido a la plataforma verde después de las próximas elecciones catalanas. Movimientos que, en los últimos meses, han generado inquietud tanto en el PSOE como en el seno del propio Ejecutivo, por la posible amenaza que una nueva formación verde y roja podría suponer para su feudo tradicional de votantes. “Por ahora, todos, tanto el Gobierno, como el PP e Izquierda Unida, han tenido una reacción muy negativa”, reconoce Uralde. “Que aparezcan nuevos actores políticos no se ve, desgraciadamente, como algo que enriquezca el debate y las propuestas. Pero tampoco esperábamos su simpatía”.

De hecho, la reacción del Gobierno no se hizo esperar en cuanto empezó a circular por los corrillos de la política la nueva apuesta de Uralde. La ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa, se dedicó a llamar por teléfono a diferentes organizaciones del sector para desprestigiar la posibilidad de poner en marcha un nuevo partido verde. Una idea para la que Uralde y los suyos tentaron también a destacadas figuras del PSOE como la ex ministra María Antonia Trujillo o la ex titular de Medio Ambiente, Cristina Narbona. La actual embajadora en París en la OCDE reconoció recientemente que “seguirá trabajando” en el PSOE, aunque creía “saludable” la creación de un partido ecologista. “Estamos abiertos a todos aquellos que compartan esta visión, sean del PSOE, de la izquierda o de fuera de la política”, añade Uralde. “Respetamos la decisión de Cristina Narbona, pero siempre será bienvenida si ella lo desea”.

Quien sí se ha sumado a la iniciativa promovida por Uralde es Alejandro Sánchez, director durante los últimos 20 años de la ONG más veterana de España, SEO/Birdlife. En una entrevista reciente concedida a la agencia EFE, el propio Sánchez reconocía que con Narbona al frente del Ministerio de Medio Ambiente no se hubieran planteado "dar el paso" de crear un partido verde, y que si se han decidido hacerlo ahora es porque el presidente José Luis Rodríguez Zapatero "se ha olvidado del medio ambiente".