Es noticia
Hacienda cierra a la banca un negocio de 3.000 millones de euros en financiación municipal
  1. España
EL AYUNTAMIENTO DE MADRID SERÁ EL MÁS PERJUDICADO

Hacienda cierra a la banca un negocio de 3.000 millones de euros en financiación municipal

Los ayuntamientos no serán los únicos perjudicados por la decisión del Gobierno de prohibirles acudir al préstamo bancario para financiar sus políticas gasto. También los bancos

Los ayuntamientos no serán los únicos perjudicados por la decisión del Gobierno de prohibirles acudir al préstamo bancario para financiar sus políticas gasto. También los bancos y cajas de ahorro sufrirán los rigores del ajuste fiscal. Y no en cuantía pequeña. Todo lo contrario. El año pasado las entidades financieras prestaron a las corporaciones locales 3.476 millones de euros adicionales, pero ahora esa fuente de negocio se ha cerrado. Ya no habrá nuevos préstamos a largo plazo. Al menos hasta el 31 de diciembre de 2011.

La financiación de las corporaciones locales (ayuntamientos, diputaciones y cabildos) se había convertido para la banca en los últimos años en un negocio extremadamente lucrativo. Hasta el punto de que desde que comenzó la crisis la deuda de los ayuntamientos con las entidades financieras ha crecido en nada menos 5.567 millones de euros. O dicho en otros términos, ha pasado de 26.588 millones de euros a 32.155 millones. Esta última cifra es el riesgo que han asumido las entidades financieras con los ayuntamientos, diputaciones y cabildos.

Esto quiere decir que el endeudamiento bancario destinado a financiar las corporaciones locales ha crecido en apenas dos años, y en un contexto extremadamente restrictivo, un 21%. Por el contrario, y según datos del Banco de España, el crédito bancario para las hogares ha pasado en ese mismo periodo de crecer un 12,5% en 2007 (media anual)) a un raquítico 0,2% en marzo de este año en términos anuales. El sector público, por lo  tanto, se ha comido el poco crédito disponible.

placeholder

           

Bancos y cajas ahora pueden reorientar esa liquidez hacia otros agentes económicos, pero con más riesgo. La mora en el sector público (al menos con los bancos) es irrelevante, mientras que en el sector privado supera ampliamente el 5% de la inversión crediticia.  Es decir, que es más seguro prestar a una administración que a un particular, lo cual es extremadamente importante en un contexto de fuerte aumento de la aversión al riesgo.

Madrid, el más perjudicado

La prohibición de acudir al crédito bancario para financiar inversión municipal -a partir del 1 de enero de 2011 tras la rectificación que hizo ayer el Gobierno- supone cerrar prácticamente las vías de financiación de los ayuntamientos.

Hay que tener en cuenta que de los 34.594 millones que adeudan en total las corporaciones locales, tan sólo 2.440 millones proceden del mercado de capitales. Es decir,operaciones en las que los alcales captan fondos a través de sus propias emisiones de renta fija. Y de esta cantidad, más de la mitad (1.340 millones) tiene su origen en el ayuntamiento de Madrid, que acumula en solitario casi la quinta parte del endeudamiento total de los ayuntamientos. Madrid y Barcelona, en concreto, son los únicos municipios que acuden a los mercados para financiarse en condiciones más favorables. El resto de municipios se ve obligado a acudir a los bancos. También acuden a los mercados de capitales las diputaciones forales, los consejos insulares y los cabildos, cuyo endeudamiento no bancario asciende a 770 millones de euros.

La rectificación que hizo ayer la vicepresidenta Salgado supone, en cualquier caso, un balón de oxígeno para la banca y para los propios ayuntamientos. Unos y otros tienen un margen de siete meses para acelerar la demanda de créditos, ya que a partir del 1 de enero esa ventanilla estará cerrada. Algo que es particularmente importante para algunos municipios, como el de Madrid.  

El ayuntamiento de Alberto Ruiz-Gallardón será, de hecho, el más perjudicado por la decisión del Gobierno, y no sólo términos absolutos, sino también relativos dado que el crédito bancario a largo es su principal fuente de financiación. El saldo de crédito a corto se sitúa en el ayuntamiento de Madrid en tan sólo 3 millones de euros, según el Banco de España, mientras que el crédito a largo se situaba al acabar el año pasado en 3.293 millones de euros. Esta segunda fuente de ingresos es la que ahora se cierra. Aunque con un tiempo extra. Probablemente por presiones no sólo de los ayuntamientos, sino también de la banca, que está a punto de ver como se cierra un suculento negocio.   

Como dice la norma, a partir de 1 de enero de 2011, las entidades locales y sus entidades dependientes “no podrán acudir al crédito público o privado a largo plazo, en cualquiera de sus modalidades, para la financiación de sus inversiones, ni sustituir total o parcialmente operaciones preexistentes”. Sólo habrá una excepción cuando la carga financiera se reduzca como consecuencia de la refinanciación de algún crédito.

El objetivo del Gobierno, como es lógico, es reducir el creciente déficit de los ayuntamientos, que se justifica en parte por un problema estructural de financiación que el Ejecutivo no ha sido capaz de resolver.

Esto explica que si en 2008 el déficit de los municipios ascendió a 5.230 millones de euros, un año más tarde subió a 5.670 millones. Pero es que para este año el desequilibrio entre ingresos y pagos escalará hasta los 7.273 millones de euros, lo que pone a muchos ayuntamientos al borde de la bancarrota. Y como los municipios no pueden quebrar por ley, lo que hacen es engordar la bola de la morosidad a sus proveedores.

Los ayuntamientos no serán los únicos perjudicados por la decisión del Gobierno de prohibirles acudir al préstamo bancario para financiar sus políticas gasto. También los bancos y cajas de ahorro sufrirán los rigores del ajuste fiscal. Y no en cuantía pequeña. Todo lo contrario. El año pasado las entidades financieras prestaron a las corporaciones locales 3.476 millones de euros adicionales, pero ahora esa fuente de negocio se ha cerrado. Ya no habrá nuevos préstamos a largo plazo. Al menos hasta el 31 de diciembre de 2011.

Ayuntamientos Banca