La explosión destroza fachadas y deja viviendas al aire

La explosión del coche bomba en la parte trasera de la Casa Cuartel de la Guardia Civil de Burgos ha sido de tal magnitud que ha destruido y ha dejado al aire algunas de las viviendas del inmueble y ha provocado que marquesinas y ventanas se hayan quedado colgadas y hayan tenido que ser retiradas por los bomberos.

Aunque la zona se encuentra acordonada, se puede apreciar el interior de algunas de las viviendas de la Casa Cuartel al haber sido destruida parte de la fachada.

Además de los cuantiosos daños ocasionados en el inmueble del instituto armado, el coche bomba ha provocado también daños de consideración en edificios cercanos, que han sido desalojados de forma preventiva. Marquesinas y ventanas han tenido que ser retiradas por los bomberos y han sido innumerables los cristales rotos que se han esparcido por la zona y que han sido los que han provocado muchas de las heridas leves a los principales afectados.

Algunos vecinos han relatado a EFE que sintieron una gran estruendo "como si se moviera la tierra".

La Policía Local, además de sus propias instalaciones, ha habilitado el polideportivo del Colegio de los Maristas, cerca de donde se ha registrado la explosión, para alojar provisionalmente a vecinos afectados, a los que se ha proporcionado víveres y mantas, han confirmado fuentes municipales.

Al lugar de los hechos se han acercado curiosos y personas que preguntaban por sus familiares, que viven en la zona afectada por la explosión.