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Montilla no logra frenar la espiral de despidos en Cataluña
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MILES DE EMPLEADOS CATALANES SE QUEDAN SIN TRABAJO

Montilla no logra frenar la espiral de despidos en Cataluña

La situación económica y laboral se le complica por momentos al presidente de la Generalitat José Montilla. El goteo de empresas que están presentando expedientes de

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Montilla no logra frenar la espiral de despidos en Cataluña

La situación económica y laboral se le complica por momentos al presidente de la Generalitat José Montilla. El goteo de empresas que están presentando expedientes de reducción de empleo en Cataluña es constante y da la sensación de que esto tan sólo acaba de comenzar. Esta última semana se han vivido varias movilizaciones en las calles, en contra de los despidos masivos y los sindicatos han anunciado que van a seguir manifestándose, ya que la situación no parece que vaya a mejorar en breve.

 

La crisis se está cebando con la industria catalana, especialmente con el sector de la automoción. En la última reunión de Nissan con sus trabajadores, la empresa ha confirmado los 1.680 despidos que ya había anunciado. La dirección presentará esta próxima semana el expediente de regularización de empleo, que afecta a los trabajadores de Zona Franca de Barcelona y de Montcada i Reixac.

 

En este mismo sector la fábrica de SEAT en Martorell ya tiene la autorización de la Generalitat para suspender los contratos de 1.969 empleados. Y sin abandonar la automoción, la fábrica de componentes Delphi en Sant Cugat del Vallés anuncia que va a suspender de empleo a 800 de sus 1.100 trabajadores. Lo que significa echar a la calle a 72% de la plantilla.

 

Y si las fábricas automovilísticas se ven obligadas a reducir plantillas, la misma suerte están corriendo los fabricantes de neumáticos. Pirelli, una de las grandes del sector, verá reducido su número de trabajadores de Manresa en un 30% su plantilla, lo que significa 280 puestos de trabajo menos.

 

El papel y las nuevas tecnologías tampoco se salvan

 

Pero no sólo la automoción se ve afectada por la crisis. La planta de producción de Torraspapel en Sarriá de Ter (Girona) despedirá a 204 personas. También del mismo sector es Acunda Paper empresa que se encuentra en un concurso de acreedores por falta de liquidez con 240 empleos en peligro.

 

Otra empresa que se ha sumado a los expedientes de regulación es

T-System -división de servicios a grandes empresas de Deutsche Telecom- que pretende despedir el 14% de su plantilla en España. La compañía con sede española en Barcelona prescindirá de 275 empleados en Cataluña.

 

Estos son sólo las preocupantes cifras que arrojan grandes empresas con nombres y apellidos. A este número hay que sumarle más de 8.000 autónomos anónimos que han tenido que bajar la persiana de sus negocios en los últimos meses. Y no serán los últimos. Todo apunta que a finales de año habrá 20.000 autónomos sin trabajo en Cataluña.

 

Montilla intenta a contrarreloj parar la situación. Hace ya unas semanas designó un comité de crisis, liderado por la consejera de Trabajo, Mar Serna, que aúna esfuerzos con Antoni Castells, al frente del Departamento de Economía, y el titular de la Consejería de Innovació, Universidades y Empresa, Josep Huguet. Entre los tres deben poner freno a una espiral de despidos en Cataluña aunque de momento su trabajo parece no dar resultado.

La situación económica y laboral se le complica por momentos al presidente de la Generalitat José Montilla. El goteo de empresas que están presentando expedientes de reducción de empleo en Cataluña es constante y da la sensación de que esto tan sólo acaba de comenzar. Esta última semana se han vivido varias movilizaciones en las calles, en contra de los despidos masivos y los sindicatos han anunciado que van a seguir manifestándose, ya que la situación no parece que vaya a mejorar en breve.