La sombra de Carod es alargada: Puigcercós gana, pero no convence, en las elecciones regionales de ERC

Los resultados electorales de los congresos regionales de ERC han evidenciado que las heridas, abiertas durante el congreso nacional del pasado mes de junio, no están curadas y que la ruptura interna del partido independista catalán se acrecienta. El presidente de Esquerra, Joan Puigcercós, no consigue hacer desaparecer la influencia del vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, del territorio. Puigcercós se ha impuesto en 9 de las 12 federaciones de Esquerra, pero no ha conseguido una victoria aplastante. Se ha dejado tres federaciones en la gatera.

 

Los últimos tantos que se apuntó Puigcercós fueron, contra todo pronóstico, los congresos de Lleida y Pirineos, donde la victoria de los críticos representada por el ex consejero de Gobernación, Joan Carretero, parecía cantada. Para anotarse estas dos federaciones en su lista de conquistas, Puigcercós se pasó el fin de semana en varios pueblos leridanos intentado convencer a los indecisos, una táctica que le ha dado resultados.

Puigcercós consiguió ganar el pulso a Carretero un día después de que su candidato quedase último, detrás de los carodistas y la crítica Ruth Carandell –ex candidata a la secretaria general del partido-, en el cónclave republicano de Barcelona. La capital catalana, la federación más importante de ERC, ha quedado en manos del hombre de Carod-Rovira, Oriol Amorós.

Puigcercós destapará su estrategia el 30 de octubre

Las otras dos derrotas las ha encajado en Tarragona y el Ebro, aunque en ambas elecciones Puigcercós no ha perdido directamente, pues en la capital tarraconense sumó sus fieles a la lista de Reagrupament Independentista (nacida de la fusión de las corrientes dirigidas por Carretero y el diputado Uriel Bertrán). Nada pudieron hacer éstos contra los elegidos por Carod. Mientras que en el Ebro, Puigcercós se unió a la mayoría, una estrategia diferente pero que le dio un resultado igualmente pésimo. 

Con estos números, ERC sabe que está internamente fragmentada en tercios desiguales, por lo que los vaivenes del partido seguirán siendo la tónica dominante hasta las primarias del partido, donde Puigcercós y Carod se verán las caras, y medirán sus fuerzas para alzarse candidatos a la presidencia de la Generalitat en las siguientes elecciones autonómicas. Antes, los independistas tienen una cita importante. El 30 de octubre, el presidente dará una conferencia para resituar ERC como fuerza de Gobierno. Así pues, habrá que esperar a final de mes para ver cómo Puigcercós salva las distancias con sus adversarios internos y les da cabida en su carrera hacia la Generalitat.