¿Los españoles primero? Casi la mitad opina que debe tener más derechos que los inmigrantes

¿Debe tener preferencia un español sobre un inmigrante a la hora de recibir atención sanitaria? ¿Y cuando se trata de elegir el colegio de sus hijos? El porcentaje de españoles que responde afirmativamente a ese tipo de preguntas crece de forma imparable, poniendo de relieve que la crisis económica está disparando el grado de xenofobia y rechazo a los inmigrantes, a quienes muchos autóctonos ven ya como rivales para acceder a las prestaciones y servicios sociales.

Así se desprende de un estudio del Observatorio Español del Racismo y la Xenofobia, dependiente del Ministerio de Trabajo que dirige Celestino Corbacho, que ha sido elaborado por María Ángeles Cea, profesora titular de Metodología de la Investigación Social en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense, y que se hará público en las próximas semanas.

El estudio, que analiza los resultados de un sondeo realizado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), revela que el 41% de los encuestados considera que los españoles deberían tener preferencia a la hora de recibir atención médica en la sanidad pública, porcentaje que se eleva hasta el 54% en el caso de la elección del colegio de sus hijos.

Ese discurso xenófobo basado en la idea de que los inmigrantes colapsan los servicios públicos está siendo alimentado por la extrema derecha, al calor de la crisis económica, para azuzar el rechazo a los extranjeros. Algunos grupos ultras, muy críticos con la supuesta tibieza del Partido Popular hacia el fenómeno de la inmigración, tratan de ocupar ese espacio ideológico a la derecha del PP con campañas incendiarias. Barrios emblemáticos de Madrid, como los de Argüelles y Salamanca, han aparecido empapelados estos días con pasquines del Frente Nacional en los que se puede leer: "Si eres español, tú siempre primero". Y sobre esta leyenda, la caricatura de un español de avanzada edad que ocupa el último lugar de una cola encabezada por cuatro inmigrantes en un centro de salud. 

"El crecimiento exponencial de la presencia de extranjeros está actuando en contra de nuestra capacidad receptiva a la inmigración. Al aumento de la percepción en demasía de la presencia de inmigrantes se suma el deseo unánime de una política inmigratoria más restrictiva, tanto en lo concerniente a la entrada como a la expulsión de inmigrantes", sostiene la autora del estudio.

Principio de igualdad

"Sorprende que cuatro de cada 10 encuestados estén de acuerdo en que los españoles tengan preferencia para recibir atención sanitaria", añade Cea. "Es un porcentaje muy elevado que contraviene el principio de igualdad en el acceso a prestaciones que son consideradas básicas para el desarrollo vital por parte de personas que también contribuyen a la Seguridad Social".

Pero lo que más llama la atención de la investigadora es que esos porcentajes de rechazo son muy similares a los expresados por "los grupos de población que normalmente muestran ser más permisivos" hacia el fenómeno de la inmigración, "sea el caso de personas con mayor nivel educativo o más escoradas hacia la izquierda en la escala ideológica, así como las de menos edad". Ese dato "preocupante" explica, a su juicio, "el calado que va adquiriendo en España el discurso de la preferencia de los nacionales, quizá por la experiencia que escuchan de otros o por la vivida por ellos en primera persona cuando acceden a centros sanitarios o buscan plaza en centros educativos".

Desde la asociación SOS Racismo rechazan los argumentos de quienes defienden el mensaje de los españoles primero. "En un ambiente de crisis económica los ciudadanos de origen extranjero son tomados como chivos expiatorios del peligro que corre el actual Estado del bienestar, a pesar de que ello suponga una legitimación de la xenofobia. Los trabajadores inmigrados aportan a las arcas de la Seguridad Social como el resto, y por tanto deben tener los mismos derechos y prestaciones".