“Fueron bastante osados al atribuir a ETA los atentados del 11-M”

A sus 29 años, el norteamericano Evan Kohlmann está considerado como uno de los mayores expertos mundiales en terrorismo yihadista. Ha entrevistado personalmente a varios líderes de Al Qaeda y ha compilado una de las bases de datos multimedia más extensas del mundo en comunicados terroristas. En Estados Unidos, donde reside en la actualidad, ha sido consultor en materia antiterrorista para el Departamento de Defensa, el Departamento de Justicia y el FBI. Como parte del Ciclo de Conferencias en Comunicación Estratégica organizadas por la Escuela de Comunicación del Instituto de Empresa, Kohlmann ofreció este lunes una charla sobre el papel de la nueva tecnología multimedia en la transformación del terrorismo contemporáneo encarnado en Al Qaeda.

Del mar de ideas envueltas en sofisticada terminología árabe del joven experto norteamericano, cabe destacar un doble mensaje. Por un lado, que la guerra en Iraq ha debilitado enormemente el conglomerado de Al Qaeda en ese país, pero no debido a un triunfo de los Estados Unidos, sino al carácter autodestructivo de la organización. Por otro, ésta ha alcanzado un vigor espectacular en Pakistán, desde extiende con fuerza su propaganda a través de las plataformas multimedia hasta llegar a las células existentes en Europa, en especial en España, Francia e Italia. Su discurso en el IE concluyó con el comentario, “es terrorífico. No es sólo una amenaza, sino múltiples amenazas, y su plataforma es la tecnología multimedia”, tras el cual, Kohlmann contestó a las preguntas que le hizo El Confidencial.

¿Cuándo comenzó a interesarse por las operaciones de grupos islámicos en España?

Comencé a interesarme por los avances del terrorismo islámico en Europa a raíz de mi libro, La Yihad de Al Qaeda en Europa. Europa es una de las regiones más importantes del mundo para Al Qaeda. Sirve de base para sus operaciones, su reclutamiento y su financiación. En concreto, en España, Francia e Italia hay una masa importante de población proveniente de países que pertenecen a la Yihad. Además, los grupos afiliados de Al Qaeda en el norte de África tienen sus principales bases en estos países, que son, para la organización terrorista, parte de la cruzada contra el Islam auspiciada por los Estados Unidos.

¿Cuál fue su primera reacción cuando se enteró de los atentados del 11 de marzo?

Asumí que tenían que ver con los grupos extremistas del norte de África. Células de extremistas islámicos marroquíes.

¿Qué pensó cuando leyó la interpretación de que ETA podía estar implicada en estos atentados?

Mi sensación es que fueron bastante osados. ETA jamás había realizado una operación de esas características. Si ves a un animal que anda y grazna como un pato y concluyes que es una oca creo que tienes que tener argumentos de peso para demostrar que es una oca.

Para usted el hallazgo en Barcelona de células Pakistaníes hace unos meses es el reflejo de un nuevo fenómeno. ¿Cuál?

Creo que pone de manifiesto que están floreciendo células en sitios donde nunca antes habían existido. Hasta ahora tan sólo en Gran Bretaña, Canadá o Estados Unidos existían comunidades de inmigrantes provenientes de Pakistán, Afganistán y Bangladés y era lógico que existieran células terroristas. En España, no existía apenas población proveniente de estos países. Ahora existen comunidades de inmigrantes más numerosas y comienzan a proliferar también células terroristas. La conexión entre éstas y Pakistán pone de manifiesto la envergadura del campo de batalla en este país, que es la madre de todas estas células y el mejor sitio para entrenarse como terrorista yihadista.

¿Cómo se financian estos grupos?

Con financiación individual, robando dinero de la manera más simple imaginable, como por ejemplo a través de la utilización fraudulenta de tarjetas de crédito. También manejan esquemas extrañísimos con los que consiguen financiarse todo tipo de gastos, como vuelos, alquileres, etc.

¿Cómo pueden los gobiernos de los países occidentales hacer frente a Al Qaeda?

Hay que aprovecharse de los fallos de esta organización, sobre todo de los fallos ideológicos que cometen. Para el mundo occidental, la clave está en fomentar su autodestrucción. Con motivo de la guerra en Iraq, por ejemplo, Al Qaeda ha tenido que poner en acción sus ideales y en lugar de hacerse fuertes frente al enemigo han terminado matándose así mismos porque no estaban de acuerdo ideológicamente los unos con los otros. Odio darle reconocimiento alguno a la guerra, porque fue un error en todos los sentidos, pero el conflicto nos ha ayudado a comprender lo inhumana y perversa que es esta organización, e, irónicamente, también nos ha ayudado a descubrir cuáles son sus puntos débiles.