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Zapatero desempolva viejos proyectos de ley para hacer frente a la crisis a medio plazo
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Zapatero desempolva viejos proyectos de ley para hacer frente a la crisis a medio plazo

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aprovechó su intervención en la clausura de las Jornadas del Círculo de Economía para anunciar un nuevo paquete

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Zapatero desempolva viejos proyectos de ley para hacer frente a la crisis a medio plazo

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aprovechó su intervención en la clausura de las Jornadas del Círculo de Economía para anunciar un nuevo paquete de reformas estructurales con las que pretende fomentar el crecimiento económico y la calidad del empleo. Sin embargo, las propuestas de Zapatero no dejan de ser viejos proyectos de ley, que tras varios años congelados, el Gobierno ha decidido rescatar para hacer frente a la crisis a medio plazo, obviando la situación actual de la economía.

Del conjunto de reformas, que el presidente del Gobierno tildó de “ambicioso”, destaca la reducción de un 30% de las cargas administrativas que soportan las empresas, ya que, según citó Zapatero, España es uno de los países de la OCDE con más regulación, lo que supone “un cuello de botella”. Para Zapatero, este recorte implicará “una mejora de la competitividad empresarial que puede suponer una subida del 2% en el PIB”. Otra de las medidas, que también ronda por los despachos del Gobierno desde hace años, y que tampoco parece programada para cambiar la tendencia económica actual, es la aplicación en España de la directiva europea de servicios, que, a juicio de Zapatero, debe suponer “una reducción del impacto inflacionario en el sector”.

“Esto servirá para eliminar barreras a la competencia y para ello el Gobierno va a presentar antes de fin de año una ley paraguas que incorporará los principios generales de la directiva, para después poder aplicar el correspondiente desarrollo legislativo en ámbitos concretos", explicó Zapatero. La transposición de esta directiva obligará a impulsar antigos proyectos como el aumento de la competencia en el transporte ferroviario de mercancías, que ahora es sólo del 3% del total, la reforma de la tarifa eléctrica y la introducción de un mayor número de competidores en el ámbito de las telecomunicaciones.

Zapatero evitó de nuevo pronunciar la palabra “crisis” y recurrió a frases como “intensa desaceleración” o “ajuste fuerte”, situación que achacó a factores externos, como el alza del precio del petróleo y de los alimentos en los últimos meses. No obstante, el presidente del Gobierno se mostró optimista, y recordó que España mantiene un diferencial de crecimiento positivo con respecto a la Unión Europea. “El futuro se gana si el rumbo es acertado y los objetivos se comparten por la inmensa mayoría”, señaló Zapatero, seguro de que España está preparada para paliar los problemas de quienes más dificultades pueden tener en este periodo y para mantener, a la vez, “la tensión modernizadora del país y su economía”.

Acuerdo político

Antes de su intervención en la clausura de las Jornadas del Círculo de Economía, el presidente del Círculo, José Manuel Lara, le recordó la última “Nota” de la entidad en la que pedía a los partidos políticos acuerdos sobre los grandes temas del país, ante lo que Zapatero respondió: "Quiero llegar a acuerdos con el PP; para mí no pesa nada la legislatura pasada”, para acto seguido señalar sus prioridades: lucha contra el terrorismo; reforma de la justicia, donde ha destacado la renovación del Tribunal Constitucional; política exterior y presidencia española de la UE en el 2010 y en el Pacto de Toledo, que debe volverse a negociar después del verano. En este punto, Zapatero aseguró que el Fondo de Reserva de la Seguridad Social tendrá 56.000 millones antes del verano, dado que el Gobierno hará una nueva provisión de 4.700 millones.

El presidente del Gobierno cerró ayer las jornadas del cincuentenario del Círculo de Economía en presencia del presidente de la Generalitat, José Montilla; el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, e importantes empresarios catalanes, como el presidente de La Caixa, Isidre Fainé; el presidente de Planeta, José Manuel Lara; el consejero delegado de Abertis, Salvador Alemany; el presidente de Ercros, Antoni Zabalza; el presidente de Vueling, Josep Piqué; y el consejero delegado de Cementos Molins, Joan Molins, entre otros.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aprovechó su intervención en la clausura de las Jornadas del Círculo de Economía para anunciar un nuevo paquete de reformas estructurales con las que pretende fomentar el crecimiento económico y la calidad del empleo. Sin embargo, las propuestas de Zapatero no dejan de ser viejos proyectos de ley, que tras varios años congelados, el Gobierno ha decidido rescatar para hacer frente a la crisis a medio plazo, obviando la situación actual de la economía.

Del conjunto de reformas, que el presidente del Gobierno tildó de “ambicioso”, destaca la reducción de un 30% de las cargas administrativas que soportan las empresas, ya que, según citó Zapatero, España es uno de los países de la OCDE con más regulación, lo que supone “un cuello de botella”. Para Zapatero, este recorte implicará “una mejora de la competitividad empresarial que puede suponer una subida del 2% en el PIB”. Otra de las medidas, que también ronda por los despachos del Gobierno desde hace años, y que tampoco parece programada para cambiar la tendencia económica actual, es la aplicación en España de la directiva europea de servicios, que, a juicio de Zapatero, debe suponer “una reducción del impacto inflacionario en el sector”.

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