Zaplana pide a Zapatero que defina los límites de la "exploración" del alto el fuego de ETA

El portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana, dijo este martes que el jefe del Gobierno tiene una "excelente oportunidad" para explicar su actuación en el llamado proceso de paz y para definir "hasta dónde ha llegado su exploración" de que el alto el fuego de ETA podía conducir al fin de la violencia. En rueda de prensa en el Congreso tras la Junta de Portavoces, Zaplana se refirió a la comunicación del Gobierno remitida este lunes al Congreso ante el debate sobre el estado de la Nación, que tendrá lugar los próximos días 3, 4 y 5 de julio.

Señaló que esta comunicación pone de manifiesto "lo alejado" que, a su juicio, está el Gobierno de la sociedad y criticó algunas de las "perlas" que recoge, como lo referente a las "condiciones de igualdad", el "consenso en las reformas territoriales", el cumplimiento del Plan de Infraestructuras y Transportes, la Ley de Dependencia y el crecimiento del poder adquisitivo. Respecto a la política antiterrorista, el Gobierno defiende en esa comunicación su decisión de "explorar" la posibilidad de que el alto el fuego permanente declarado por ETA en marzo de 2006 condujese al fin de la violencia, asumiendo su responsabilidad de dirigir la política antiterrorista.

"Tiene el presidente una excelente oportunidad para trasladar un debate sincero de todo lo que ha pasado, de sus actuaciones, de poder explicarse ante la Cámara, ante los ciudadanos y ante la oposición", dijo, y le pidió que "no la desaproveche". Así, Zaplana solicitó a Zapatero que defina "qué considera explorar y hasta dónde ha llegado con su exploración", al tiempo que consideró este debate como el "mejor marco" para "decirle la verdad a los españoles y sacarlos de tanta confusión".

El dirigente del PP, preguntado si su partido presentará una resolución sobre terrorismo, explicó que éstas se hacen de acuerdo al desarrollo del debate e insistió en que aún no están concretadas ni redactadas, aunque no lo descartó. Además, criticó los tiempos fijados por la Junta de Portavoces para el debate sobre el estado de la Nación y reprochó que no se haga ninguna distinción entre el PP y el resto de grupos parlamentarios en la réplica, que está fijada en diez minutos.

Además, reprobó que el presidente del Congreso, Manuel Marín, haya hecho una advertencia en el sentido de que será "estrictamente riguroso" con los tiempos ya que, en opinión de Zaplana, en un debate de esta importancia no habría por qué limitar el tiempo.