Telefónica no descarta un despido colectivo para cumplir los objetivos de su plan estratégico
El consejero delegado, Emilio Gayo, ha remarcado que cualquier proceso en este sentido se hará "siempre de la mano de los representantes de los trabajadores"
El equipo directivo de Telefónica presenta el plan estratégico. (EFE/Víctor Lerena)
Un despido colectivo está entre las posibilidades que maneja Telefónica para cumplir con los objetivos de reducción de costes que se ha marcado de cara a 2030. Durante la presentación del nuevo plan estratégico para los próximos cinco años, los directivos de la teleco han evitado pronunciar la palabra ERE (expediente de regulación de empleo), pero tampoco han descartado tajantemente esta opción.
Interpelado directamente por esta cuestión durante la rueda de prensa, el consejero delegado de Telefónica, Emilio Gayo, ha remarcado en varias ocasiones que cualquier proceso en este sentido se hará "siempre de la mano de los representantes de los trabajadores". Por su parte, el presidente de la compañía, Marc Murtra, ha defendido que la aplicación del plan va a suponer tomar decisiones que sean necesarias y, en algunos casos, "muy difíciles".
Murtra también ha advertido la necesidad de actuar para atajar el aumento del coste del espectro radioeléctrico, los arrendamientos y la mano de obra. Su intención es reducir en un 25% de sus costes operativos del centro corporativo y de sus unidades globales (Telefónica Tech, Telefónica Infra y su unidad de Innovación), descentralizar decisiones y captar eficiencias. De esta manera, estima un impacto bruto de hasta 2.300 millones de euros de ahorros en 2028 y hasta 3.000 millones en 2030.
Como informó El Confidencial, antes del verano ya estuvo analizando incluir un ajuste de personal de entre 4.000 y 5.000 personas para reducir los costes de estructura del grupo y mejorar la eficiencia. Se planteó, concretamente, poner en práctica un ERE similar a los despidos colectivos que se aplicaron durante los ocho años de mandato de José María Álvarez‑Pallete y que fueron iniciados por César Alierta tras la crisis financiera mundial de 2008.
El plan estratégico cuenta con el apoyo unánime del consejo de administración, donde se encuentra representado el Estado a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que es uno de los principales accionistas de la compañía con el 10% del capital en su poder. Por lo tanto, la aplicación de un hipotético despido colectivo de este tipo contaría con el visto bueno del Gobierno de España.
El último ajuste masivo ejecutado en Telefónica tuvo lugar en los primeros meses de 2024. También se realizó a través de un ERE, que en un primer momento se iba a extender a 5.000 empleados, pero que tras la negociación con los sindicatos redujo su afectación a 3.421 personas y finalmente recibió un exceso de solicitudes. Con este proceso, la operadora aseguró que ahorraría unos 285 millones anuales.
Claves del nuevo plan estratégico
Ya se conoce que el nuevo plan estratégico incluye una reducción del dividendo. La retribución al accionista en este 2025 se mantendrá en los 0,30 euros por título, pagaderos en dos tramos (diciembre de 2025 y junio de 2026). Será el año que viene cuando disminuya en un 50%, realizando un solo pago en efectivo de 0,15 euros en junio de 2027. En los ejercicios siguientes, el objetivo de remuneración se basará en un rango del 40%-60% del flujo de caja libre base para dividendo.
Asimismo, se ha fijado el objetivo de hacer crecer los ingresos entre un 1,5% y el 2,5% anual durante el periodo 2025-2028, acelerándose hasta el rango del 2,5%-3,5% hasta 2030. Es una proyección más ambiciosa que la planteada hasta ahora en el plan estratégico que presentó el anterior presidente, José María Álvarez-Pallete, que contemplaba un alza de la facturación del 1% anual.
Para el resultado bruto de explotación (ebitda) ajustado, estima un alza anual de entre el 1,5% y el 2,5% para la primera mitad del plan estratégico y de entre el 2,5% y el 3,5% en la segunda. En este caso, la anterior hoja de ruta, que se extendía hasta 2026, preveía un aumento del 2%. Asimismo, ha proyectado una reducción del apalancamiento hasta aproximadamente 2,5 veces de deuda neta sobre ebitda a 2028, desde las 2,9 veces actuales.
Será en 2026 cuando disminuya el dividendo en un 50%, realizando un solo pago en efectivo de 0,15 euros en junio de 2027
Fuera del plan se ha quedado el proceso de consolidación en el que Murtra ha insistido cada vez que ha tenido una aparición pública, limitándose a señalar que "Telefónica estará preparada para las posibles oportunidades que se presenten en el horizonte del plan". Durante el Capital Markets Day, el presidente ha explicado que no incluye la consolidación porque es una parte adicional. "Va a ocurrir, pero el plazo es incierto", ha señalado
Un despido colectivo está entre las posibilidades que maneja Telefónica para cumplir con los objetivos de reducción de costes que se ha marcado de cara a 2030. Durante la presentación del nuevo plan estratégico para los próximos cinco años, los directivos de la teleco han evitado pronunciar la palabra ERE (expediente de regulación de empleo), pero tampoco han descartado tajantemente esta opción.