Oslé prepara la salida de la vieja guardia de Tatxo Benet en Mediapro

Orient Hontai, el fondo de capital riesgo chino propietario de Mediapro, oficializó el pasado jueves el relevo en la presidencia de la mayor productora audiovisual de España. Como adelantó en exclusiva El Confidencial hace dos semanas, Sergio Oslé asume el timón de la compañía catalana en sustitución de Tatxo Benet, fundador del grupo y máximo responsable junto con Jaume Roures durante más de tres décadas. Pero los cambios no se van a quedar ahí.

Según distintas fuentes del sector, Oslé, que formalmente ejercerá de presidente y consejero delegado desde el próximo 1 de enero de 2026, prepara ya una reorganización del equipo directivo que afectará también a la número dos de Mediapro, Laura Fernández, directora general y mano derecha de Benet. Fernández, que ya se ha reunido con el nuevo presidente para conocer sus planes, fue nombrada el pasado 1 de enero responsable del día a día de la multinacional española. Antes, había sido consejera delegada de The Mediapro Studio, encargada de la gestión y la estrategia de todas las producciones y productoras integradas en la sociedad holding.

Vinculada a Mediapro desde 2009 y con más de dos décadas de experiencia internacional en la creación, producción, distribución y promoción de contenidos audiovisuales para cine y televisión, Fernández es una de las personas con más experiencia del sector en España. Entre 2012 y 2016, fue directora del área de Cine y Desarrollo Internacional de TV de Globomedia y, desde 2016, directora de Contenido Internacional del grupo, liderando la estrategia y puesta en marcha de producciones originales en las oficinas del grupo a nivel mundial.

Sin embargo, Oslé, ex presidente de Movistar+ y ex consejero delegado de Telefónica España, considera que, como Benet, es una de las responsables de la actual situación de Mediapro. La compañía sufrió a finales del pasado mes de septiembre una nueva rebaja de su calificación financiera por parte de Fitch. La agencia de rating advirtió en su informe la delicada situación financiera de la compañía con base en Barcelona, cuyo beneficio operativo o EBITDA (beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones) sufrirá una caída próxima al 25% el próximo año, una bajada de la facturación acumulada del 2% hasta 2027 y una pérdida de más de dos puntos de margen, hasta el 10%.

Oslé, ex presidente de Movistar+, prepara ya una reorganización del equipo directivo

Las funciones de Laura Fernández las realizará ahora Carlos Núñez, ex consejero delegado de Prisa Media hasta el pasado mes de febrero, que se incorpora a Mediapro como número dos de Oslé.

El análisis es similar para Juan Ruiz de Gauna, consejero ejecutivo de Mediapro y director general hasta finales de 2024. De Gauna es una de las personas con más experiencia en el sector, ya que a lo largo de su larga carrera profesional ha pasado por Antena 3, Cadena Cope, Cadena SER, Telemadrid y Telefónica. En Mediapro ha trabajado durante los últimos 23 años, como persona de confianza de Tatxo Benet y Jaume Roures.

Por último, otra de las personas que está en el alero es Miguel Cardenal, director de Negocio de Mediapro, donde se incorporó en 2018. Especialista en recursos humanos, Cardenal fue presidente del Consejo Superior de Deportes entre 2012 y 2016, durante el primer mandato de Mariano Rajoy al frente del Gobierno. Su fichaje por la productora fue interpretada como un escándalo por haber hecho leyes a la medida para la concesión de los derechos deportivos.

Un pozo sin fondo

Fitch ha rebajado la calificación de solvencia de Mediapro de 'B' a 'B-', lo que deja a la compañía audiovisual, que ya es 'bono basura', al borde de lo que se conoce como riesgo sustancial de impago. Una nota que le dificulta el acceso a la financiación bancaria tradicional, por lo que le hace depender de fondos de deuda que suele cobrar tipos de interés próximos al 10%.

Southwind Media Holding, dueño de Orient Hontai, ya ha invertido más de 1.500 millones en Mediapro. Primero, con la compra del 53% inicial por cerca de 900 millones, y después con el rescate de 620 millones que ejecutó para superar el covid. Fuentes financieras apuntan a que, a día de hoy, con un EBITDA previsto de menos de 100 millones y una deuda de cerca de 600 millones, el valor real, quitado el pasivo, tiende a cero.

Por ello, la multinacional china considera esencial el relevo de la actual cúpula directiva, además de reconfirmar su apoyo a una compañía que cuenta con una plantilla de 7.000 personas.