El dueño del vino Tío Pepe anuncia despidos como parte de su plan de reestructuración

González Byass, la compañía bodeguera con 190 años de historia que comercializa conocidos vinos como el de Tío Pepe, ha iniciado un plan de reestructuración. El proceso conllevará despidos colectivos, una medida que ha adoptado para asegurar la viabilidad de su negocio en un momento complicado para el sector, debido a la caída del consumo de alcohol en España y la crisis del brandy en Filipinas, uno de sus principales mercados.

El número de despidos aún no está cuantificado, aunque la compañía ha manifestado su intención de que el número de salidas sea el menor posible. En cualquier caso, ahora se inicia un periodo de negociación con los representantes de los trabajadores. "Se implementarán medidas que puedan resultar beneficiosas para todas las partes y de forma que el procedimiento se lleve a cabo de manera responsable, transparente y respetuosa", ha señalado en un comunicado.

"La decisión responde a la necesidad de adaptar la estructura de la compañía a la actual realidad del mercado y asegurar su competitividad a largo plazo", ha remarcado. Además de la conocida crisis del alcohol, que afecta a todo el sector, principalmente por el menor consumo entre los jóvenes, González Byass también se ve afectado por los tipos de interés de la deuda y el impacto de las políticas arancelarias en la comercialización exterior en algunos mercados, sobre todo en Estados Unidos.

Ante esta situación, insiste en que "ha identificado la necesidad de ajustar sus modelos operativos y organizativos de forma que le permitan adaptarse a las nuevas perspectivas del mercado y mejorar su eficiencia". Junto al despido colectivo, añade que está implementando un plan de acción centrado en la contención de gastos, la optimización del portfolio, la mejora de procesos operativos y la venta de activos no estratégicos.

Los últimos datos económicos que tiene depositadas en el Registro Mercantil corresponden al ejercicio fiscal que finalizó en agosto de 2023. Sus ingresos se redujeron en casi un 4%, hasta los 90,1 millones de euros. Fue una caída de un solo dígito, pero suficiente para mostrar unas pérdidas de 13 millones al final de su cuenta de resultados, siendo uno de los peores años de su centenaria historia.

A través de este plan de reestructuración pondrá más foco en sus marcas prioritarias y en nuevas líneas comerciales. Busca así la aceleración de un camino de rentabilidad sostenible, para seguir creando valor y continuidad de una compañía familiar que forma parte del patrimonio vinícola español.

Otras compañías en dificultades

González Byass no es la única compañía de bebidas alcohólicas que muestra problemas financieros. Sevillan Craft Spirits, la empresa andaluza propietaria de la conocida ginebra rosa Puerto de Indias, cerró el pasado julio la refinanciación de 30 millones de deuda. Como informó este medio, era la segunda vez en poco más de un año que se retoca el calendario de deuda, ya que en 2024 hubo un acuerdo con diferentes entidades para modificar los vencimientos.

El acuerdo con los acreedores llegó en un momento financiero delicado para Sevillan Craft Spirits, que nunca ha conseguido apuntarse ganancias al final de su cuenta de resultados. Las últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil son las de 2023, ejercicio en el que obtuvo unas pérdidas de 9 millones de euros. Aunque la premura con la que se ha cerrado, la refinanciación y el respiro económico que le han brindado para seguir creciendo muestra una confianza de las entidades en su negocio.