Iberdrola indemniza con 4,4 millones a Armando Martínez tras cesarle como CEO

Armando Martínez se convirtió, en octubre de 2022, en el primer CEO de Iberdrola en 22 años. Un cargo que hasta entonces estaba integrado en la figura del presidente ejecutivo, Ignacio Sánchez Galán. Pero Martínez ha durado dos años y medio en el cargo. La eléctrica anunció el pasado 24 de junio el nombramiento de Pedro Azagra como nuevo CEO de la compañía. Aunque, para hacer hueco a Azagra, Iberdrola ha tenido que pagar 4,4 millones de euros a Armando Martínez para rescindir su contrato.

“Con fecha 24 de junio de 2025, se han abonado los conceptos liquidables correspondientes a la finalización de la prestación de servicios del consejero delegado, incluyendo una indemnización equivalente a dos anualidades de la retribución, por un importe total de 4,4 millones de euros”, detalla Iberdrola en su informe semestral publicado en la CNMV. Una información pública ante la que la empresa no ha querido añadir nada a este medio.

Armando Martínez cierra su etapa como consejero de Iberdrola con unos ingresos totales de 13,2 millones de euros. La compensación de 4,4 millones de euros se suma a los 1,1 millones que generó por sus primeros tres meses como CEO en 2022, entre variables y retribución fija. En 2023, su sueldo por estas dos vías alcanzó los 4,07 millones de euros y, en 2024, se redujo levemente hasta los 3,75 millones de euros, frente a los 14,14 millones que cobró en el último año completo el presidente ejecutivo de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.

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Aunque, en 2025, el exconsejero cobró otro bonus. Martínez recibió el pasado 28 de febrero un total de 80.000 acciones de Iberdrola por el sistema de retribución variable a largo plazo "Bono Estratégico 2020-2022" de la compañía. El consejero delegado sale de la compañía, según el registro de la CNMV, con 3,8 millones de euros de acciones de Iberdrola, ya que en el cierre de 2024 contaba con un total de 169.179 participaciones de la compañía.

Cambio en la indemnización

El nombramiento de Armando Martínez como consejero delegado provocó un cambio en los contratos de la alta dirección que afectaba a las condiciones del propio Ignacio Sánchez Galán, en lo que a indemnizaciones se refiere. Según detalla la compañía en su informe de 2023, en junio de ese año, el consejo de administración pactó reducir de tres a dos anualidades la indemnización en el caso de extinción de contrato.

Un cambio que también afecta a las cláusulas de ‘no competencia’. La creación del puesto de consejero delegado en Iberdrola hizo que la duración de esta cláusula para la alta dirección, que solo incluía a Sánchez Galán y Martínez por entonces, se ampliase de dos a tres años.

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Ahora, no podrá ejercer ningún cargo en rivales de Iberdrola hasta junio de 2028. El exCEO de Iberdrola no podrá ser administrador, ni miembro del equipo directivo, ni prestar servicios en otra entidad que tenga un objeto social total o parcialmente análogo al de Iberdrola o que sea su competidora.

Martínez saldrá al mercado tras dos años y medio como número dos de Ignacio Sánchez Galán. Antes de su ascenso, ocupó el puesto de director del Negocio de Redes (transporte y distribución de Iberdrola) y, entre 2002 y 2014, tuvo responsabilidades en Iberdrola México, donde alcanzó el cargo de director general. El puesto de CEO de Iberdrola ya lo ejerce Pedro Azagra, que aterriza en Madrid tras tres años en Estados Unidos.