Galp plantea despidos en su división de renovables y el cierre de su autoconsumo

Galp se une a la tendencia del mercado de revisar sus costes en el negocio renovable en un momento delicado del mercado. La petrolera portuguesa ha iniciado un proceso de reestructuración de plantilla en Galp Solar en España y analiza el cierre de su negocio de autoconsumo para hogares, hasta 2022 denominado ei Energía Independiente.

La división de Recursos Humanos de la petrolera portuguesa ya ha contactado con varios trabajadores para comunicarles este ajuste de personal, según informan fuentes conocedoras a El Confidencial. Una plantilla de Galp Solar que, según los datos de cierre de 2023, se sitúa en 47 trabajadores que se integra dentro de los 372 trabajadores que tiene la portuguesa en España contando con su negocio convencional de hidrocarburos.

Galp ha preferido no hacer declaraciones ante la consulta de este medio sobre esta reestructuración. La petrolera, al igual que le ha sucedido a otros competidores como BP, ha decidido revisar los costes fijos de su negocio renovable en un momento delicado del mercado.

Los precios cero, o incluso negativos, del mercado mayorista generan grandes dificultades para, entre otras cosas, cerrar acuerdos de venta de energía a largo plazo, los denominados PPAs. Una situación que se suma al eterno atasco administrativo de los proyectos y a los temidos vertidos, o ‘curtailment’, que se han disparado con eventos como el apagón.

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La empresa apostó con fuerza por el negocio solar en España cuando compró la empresa solar Titan 2020, una joint venture que compartía con Cobra, por entonces perteneciente a la constructora ACS, por cerca de 600 millones. En eólica, invirtió cerca de 300 millones de euros en 16 parques en Aragón. Galp Solar también ha apostado por las baterías, como la hibridación de cuatro de sus plantas fotovoltaicas en Alcázar de San Juan (Ciudad Real) con un total de 70 ‘megas’ por un total de 35 millones.

Cierre de su negocio de autoconsumo

Otro de sus planes es cerrar su negocio de autoconsumo para hogares, según informan fuentes conocedoras. Una decisión que en España también ha adoptado su ‘paisana’ EDP y que responde a la compleja situación del mercado, donde los hogares tienen serias dificultades para rentabilizar la inversión de sus placas domésticas con precios cero en el mercado.

Un negocio que, después de su auge en 2022, se ha desplomado. Galp concentró ese mismo año todo su negocio de autoconsumo bajo la marca Galp Solar, hasta entonces lo prestaba con su filial ei Energía Independiente. Aquel año, la empresa contaba con una cartera de cerca de 4.000 clientes, tanto domésticos como empresariales.

Ahora, tanto la salida de clientes como la dificultad para cerrar nuevos contratos, ha llevado al cierre de esta división. Un servicio que, por otra parte, mantiene en su país de origen ya que puede integrar en su oferta multienergética pese a ser deficitario.