Iberdrola pierde a la directora global de RRHH y a su equipo en plena guerra sindical

Iberdrola ha decidido eliminar de golpe el departamento global de Talento y Cultura, lo que hasta hace poco se llamaba Recursos Humanos en la mayoría de las empresas. Según aseguran fuentes próximas a la compañía eléctrica, en los últimos días se ha producido la salida de Estrella Martín Segurado, la máxima responsable del área, que apenas llevaba cinco meses en el cargo, y de una decena de sus colaboradores.

La ya exdirectiva se incorporó a Iberdrola en noviembre de 2022 procedente de OW Ocean Winds y Electricidad de Portugal, donde había estado al frente de los departamentos de personal. Primero como ejecutiva de desarrollo de Global Talent Learning y, desde finales del pasado año, como directora global de Talento y Cultura de la eléctrica. Pero la responsabilidad en el cargo apenas le duró cinco meses, porque a finales de marzo abandonó la compañía.

Segurado ha indicado que se trata de una salida por decisión propia, pese a que había sido promocionada en noviembre. En concreto, por desacuerdo con la estrategia y la falta de medios para llevarla a cabo. De hecho, agrega que, a diferencia de la mayoría de los casos de salidas de ejecutivos de Iberdrola, no ha recibido ningún tipo de indemnización, ya que se trata de una salida voluntaria.

Otras indican que se trata de una destitución por causas organizativas. Desde Iberdrola no han respondido a las llamadas de El Confidencial para conocer su versión sobre esta información, ni para explicar el despido de una parte relevante del equipo —cerca de diez personas— que dirigía Estrella Martín Segurado. Porque, a las dos semanas de la salida de la directora de Recursos Humanos, la eléctrica, cuyo presidente aseguró en octubre de 2024 que "las personas son lo primero", prescindió de golpe de sus colaboradores, según ha reconocido la ya exdirectiva.

Segurado reportaba directamente a Galán y tenía a su cargo 45.000 empleados de 95 nacionalidades repartidos en 23 países

Segurado reportaba directamente a Ignacio Sánchez Galán, según ha explicado, y tenía a su cargo 45.000 empleados de 95 nacionalidades repartidos en 23 países, desde España, Reino Unido y Estados Unidos hasta Brasil y México. Su marcha es significativa porque la propia Iberdrola resaltó el pasado mes de enero que la compañía había sido reconocida como 'Top Employer Enterprise' en la mayoría de las geografías en las que está presente.

Según dicho comunicado, la de 'Top Employer' es una certificación basada en un análisis exhaustivo y riguroso de las prácticas y métricas en gestión de personas y del impacto de estas, tanto en el conjunto de la organización (estrategia y resultados) como en el 'engagement', atracción y desarrollo de talento. La multinacional reconocía que en los dos últimos años el clima laboral había mejorado en 18 puntos básicos, "llegando a un nivel de recomendación de la compañía del 83 %". "No es habitual que una empresa obtenga este reconocimiento en tantos países", agregaba.

Calendario de manifestaciones

Sin embargo, estos sellos de calidad contrastan con la opinión de los sindicatos. UGT, Comisiones Obreras y ELA han convocado varias concentraciones en las sedes de Iberdrola para reclamar la subida salarial ligada al IPC. El próximo 17 de mayo se celebrará la próxima, en Bilbao, en la sede oficial de la eléctrica, y posteriormente habrá otra el día 30 ante la junta general de accionistas. Además, han convocado una huelga para el 6 de junio.

No es la primera vez que estos sindicatos se movilizan. Con motivo de la entrega de las Becas Iberdrola, acto celebrado en el campus de la compañía y presidido por el rey Felipe VI, UGT y Comisiones Obreras reclamaron una subida salarial al considerar que, mientras Galán gana 14,14 millones anuales, casi 40.000 euros diarios, la plantilla de la eléctrica en España, en los últimos cuatro años, ha tenido un incremento salarial del 2,8 %, siendo el IPC del 18,10 %. Las otras organizaciones sindicales, como SIE, Atye y USO, no han refrendado estas protestas.