Arabia Saudí puja por comprar los superyates de Marina Barcelona 92 por 500 millones

Arabia Saudí sigue poniendo sus ojos en España tras la compra del 10% de Telefónica. Fuentes próximas a la operación señalan que Public Investment Fund (PIF), el fondo soberano de la monarquía absolutista de Oriente Medio, ha entrado en la puja por Marina Barcelona 92 (MB92), compañía de mantenimiento y reparación de superyates propiedad del fondo luxemburgués Squircle Capital. Blackstone y Apollo Asset Management también se han interesado por la empresa, que acaba de poner en marcha un astillero cerca de Riad.

PIF, que gestiona más de 900.000 millones de dólares en todo el mundo, ha mantenido varias conversaciones con JPMorgan, banco asesor de Squircle Capital, para sondear la adquisición de MB92, fundada por Jorge Ventosa y Pepe García-Aubert. El fondo luxemburgués, con oficinas en Milán y Barcelona, posee el 93 % de la empresa, que también dispone de astilleros en la Costa Azul francesa.

Squircle Capital, que administra unos 1.000 millones de euros en activos, lleva más de un año intentando vender la compañía catalana. Sin embargo, pese a las compras realizadas durante este periodo, no ha logrado que ningún interesado pague los 500 millones de euros que esperaba obtener por el traspaso del grupo.

El pasado enero, MB92 anunció la adquisición de GYG Ltd, sociedad británica de origen palmesano especializada en pinturas para buques de lujo. La operación refuerza su estrategia de “impulsar el crecimiento mediante la consolidación, fortaleciendo su capacidad para satisfacer las cambiantes demandas del sector”.

El interés de PIF coincide con el proyecto de MB92 de desarrollar un nuevo centro de reacondicionamiento especializado de yates en Oriente Medio. La compañía, que gestiona cada año unos 200 barcos de hasta 180 metros de eslora, ha creado una plataforma en Umm Al Hassan, en Arabia Saudí, gracias a una concesión del Gobierno saudí.

Ese astillero se ubica junto al complejo turístico de la isla Sindalah y forma parte de Neom, el megaproyecto urbano promovido por Mohamed bin Salman en el mar Rojo. Con un área de servicio de 10.000 m², MB92 Red Sea atenderá yates de hasta 45 metros de eslora y contará con un elevador de 300 toneladas.

Los otros interesados

MB92 posee instalaciones en Barcelona y La Ciotat (Provenza) y acaba de adjudicarse un tercer astillero en Golfe-Juan (Costa Azul) de 9.000 m². El grupo cerró 2023 con una facturación de 228 millones de euros (8 % más que en 2022). El EBITDA (beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones) se situó en torno a los 31 millones (+34 %), y el beneficio neto alcanzó los 15 millones, más del doble que el año anterior.

Squircle Capital entró en el capital de la multinacional catalana en 2019, al comprar un 77,5 % por unos 105 millones de euros. En 2022 elevó su participación hasta el 93 %. El resto permanece en manos de los fundadores.

Blackstone cerró el pasado febrero la compra de Safe Harbor Marinas, el mayor operador de yates de EEUU, por 5.650 millones de dólares, a través de su fondo de infraestructuras, el mismo vehículo que Apollo Asset Management usa para invertir en plataformas marítimas.