Los Polanco se posicionan del lado del bando de Moncloa en la guerra por Prisa
Los fundadores de 'El País' votaron en contra de la última ampliación de capital y no apoyaron la permanencia de Oughourlian como condición a la refinanciación de la deuda
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La familia Polanco, la fundadora de 'El País', ha decidido posicionarse del lado de los inversores próximos al Gobierno de Pedro Sánchez en la batalla por el control de Prisa. Así se desprende de la demanda de impugnación contra Joseph Oughourlian presentada por Global Alconaba, la sociedad que lideran Andrés Vicente Entrecanales y José Miguel Contreras, empresarios cercanos a Moncloa, en la que se asegura que Manuel Polanco votó en contra de la última ampliación de capital y se abstuvo de apoyar al actual presidente de Prisa en el proceso de refinanciación.
Según este documento presentado este jueves por el bufete CMS Albiñana y Suárez de Lezo, los Polanco, dueños aún del 7,6% del capital, votaron en contra de la oferta pública de suscripción (OPS) sin derecho de suscripción preferente por 40 millones de euros aprobada por el consejo de administración la semana pasada. Una ampliación de capital que fue colocada entre fondos de inversión próximos a Oughourlian, que a su vez comunicó la conversión de bonos en acciones por el 5% del capital. Dos transacciones realizadas a la par que supusieron una dilución del 10% para todos los accionistas significativos, menos para Amber Capital, la sociedad de capital riesgo liderada por Oughourlian, que mantuvo su 29,9% al canjear los bonos por títulos de nueva emisión de Prisa.
Global Alconaba ha impugnado ante la justicia este acuerdo por privar "a los accionistas de Prisa de su derecho preferente a la suscripción de las nuevas acciones", tal y como se había hecho en las dos anteriores ampliaciones de 2023 y 2024 por 130 y 140 millones, respectivamente. A esas inyecciones de dinero fresco acudió la sociedad liderada por Varela Entrecanales y Contreras, conocido por su cercanía con Pedro Sánchez, así como los Polanco, que hasta la fecha habían apoyado a Oughourlian.
Sin embargo, en enero, cuando se sometió a votación la subida del sueldo del consejo de administración y de Pilar Gil, la vicepresidenta y directora financiera, la familia fundadora no votó a favor. La ruptura total se produjo el pasado 25 de marzo, cuando el presidente del grupo de medios propuso esa tercera ampliación por "interés social", operación a la que se opuso Global Alconaba, Isabel Sánchez Garía, María José Marín Rey Stolle (ambas consejeras independientes, también cercanas al PSOE), y Manuel Polanco Moreno.
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"Se observará que el efecto y el fin de excluir a los accionistas de acudir a esta ampliación de capital reposa sobre el interés en diluir la participación de los actuales accionistas, y reducir su capacidad de decidir y controlar la gestión", indica la demanda de impugnación, la cual añade que esta dilución "no repercutirá sobre el primer accionista, quien conserva la participación anterior convirtiendo bonos". En esta acción judicial, Varela Entrecanales y Contreras exponen a través de CMS Albiñana que "se trataba de una decisión “pre-aprobada”, sin consulta del resto de los consejeros, confeccionada a espaldas de aquellos, sobre la que se impidió una discusión mínima acerca de las bondades que dicha suscripción podría acarrear para la sociedad y sus accionistas".
No fue el único punto del orden del día de esa reunión del consejo el pasado 25 de marzo que los Polanco no apoyaron. En la demanda de impugnación se explica que la familia fundadora se abstuvo, junto a Marín Rey-Stolle de refrendar que la refinanciación de los 750 millones que adeuda Prisa llevara adjunta la cláusula que exige la permanencia de Oughourlian como presidente de la compañía editora de 'El País'.
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La explicación es que esta "clase de cláusulas posicionan al acreedor en un lugar de privilegio que le permitiría anunciar el vencimiento anticipado del préstamo por el mero hecho de que la sociedad decidiera un cambio en la presidencia del consejo o el cese de dicho presidente como consejero, lo que, como es lógico, generaría un perjuicio irreparable para los accionistas privados de sus facultades de control o, en su caso, para la sociedad ante su incapacidad para hacer frente a la deuda que sería exigible si venciera anticipadamente".
Esta cláusula, según fuentes próximas a Prisa, habría sido exigida por PIMCO, la gestora de fondos que atesora 500 de los 750 millones de la deuda del grupo como garantía de que la compañía cumplirá el plan estratégico asociado a la refinanciación. Este plan descarta la inversión o la participación en la puesta en marcha de una televisión en abierto, como ha pedido Global Alconaba en coordinación con Moncloa.
Favor del Santander
Por todo ello, Global Alconaba ha pedido al juzgado de lo mercantil que adopte medidas cautelares para suspender el acuerdo sobre la refinanciación de la deuda "en lo relativo a las cláusulas sobre el condicionamiento a la permanencia material del primer accionista de la compañía al frente de la presidencia del Consejo de Administración". La demanda ha sido firmada por Rafael Suárez de Lezo, presidente emérito del bufete, y Juan Fernández Aguado, socio del departamento de procesal.
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La posición de los Polanco es muy relevante en la batalla por el control del accionariado ante la próxima junta general. Dado que el grupo de Contreras aglutina cerca del 17% del capital, si la familia se suma a ellos llegará ya al 25%.
Falta saber qué hará Vivendi, que atesora el 12% de las acciones, y que este pasado miércoles hizo una entrevista con la agencia pública EFE, presidida por Miguel Ángel Oliver, antiguo secretario general de Comunicación de Pedro Sánchez. En ella negaba ninguna presión de Moncloa para decantarse por uno de los bandos después de que, hace ya casi dos semanas, se conociera que su consejero delegado se ha visto reunido con Oscar López, ministro de Transformación Digital, y Marc Murtra, presidente de Telefónica, para hablar sobre su papel en esta batalla.
La participación de los Polanco está pignorada a favor del Banco Santander, que le ha concedido varios créditos para poder mantener ese paquete del 7,6% comprado a crédito. Como garantía, la entidad financiera tiene derecho a quedarse con las acciones en caso de incumplimiento de algunas de las condiciones. Sin embargo, el pasado mes de enero liberó a la familia de una posible ejecución al darle una prórroga para aportar nuevos avales y evitar adueñarse de esas acciones. El banco tiene también en su poder un 4% del capital de Prisa de forma directa.
La familia Polanco, la fundadora de 'El País', ha decidido posicionarse del lado de los inversores próximos al Gobierno de Pedro Sánchez en la batalla por el control de Prisa. Así se desprende de la demanda de impugnación contra Joseph Oughourlian presentada por Global Alconaba, la sociedad que lideran Andrés Vicente Entrecanales y José Miguel Contreras, empresarios cercanos a Moncloa, en la que se asegura que Manuel Polanco votó en contra de la última ampliación de capital y se abstuvo de apoyar al actual presidente de Prisa en el proceso de refinanciación.