Europastry deshace los trámites de su salida a bolsa y aleja un nuevo intento de cotizar
El pasado 8 de enero, la compañía dirigida por Jordi Gallés anuló los reglamentos internos de la Junta General de Accionistas y del Consejo de Administración
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Europastry tenía previsto salir a bolsa el pasado 10 de octubre, pero canceló la operación solo dos días antes. En el comunicado de renuncia manifestó su intención de volver a intentarlo "cuando la situación de los mercados lo permita". Sin embargo, la empresa catalana de masas congeladas está revirtiendo los pasos que dio para dar el salto al parqué, alejando la posibilidad de realizar una nueva tentativa para empezar a cotizar.
El 8 de enero, la compañía dirigida por Jordi Gallés anuló los reglamentos internos de la Junta General de Accionistas y del Consejo de Administración, según la documentación consultada. Son normativas que Europastry había aprobado el 30 de septiembre, diez días antes de la fecha de su frustrada salida a bolsa, para cumplir con las exigencias que la Ley de Sociedades de Capital y el Código de Buen Gobierno de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) imponen a las cotizadas.
Con la derogación de esos dos reglamentos, pasa a operar bajo un marco normativo más sencillo, reduciendo la burocracia necesaria para tomar decisiones internas. Como sucede con la amplia mayoría de empresas no cotizadas, ahora se rige simplemente por los estatutos sociales, que también han sido modificados para adaptarlos a esa nueva realidad alejada de los mercados. La compañía ha declinado realizar comentarios sobre esta información.
La marcha atrás de Europastry contrasta con el acelerón que están realizando otras compañías para empezar a cotizar en la bolsa española. Hotelbeds es una de las empresas que sí considera que es el momento idóneo para dar el salto al parqué, como demostraba este jueves al anunciar su intención de entrar en el Mercado Continuo en febrero. Su intención es realizar una oferta primaria con la que emitirá acciones por valor de 725 millones de euros.
La marcha atrás de Europastry contrasta con el acelerón que están realizando otras compañías para empezar a cotizar en España
Algunos analistas también consideran que el escenario bursátil ha mejorado. La socia responsable del área de Mercados de Capital y OPVs en España de EY, Rosa María Orozco, manifestó hace un mes que "el contexto macro puede ser razonable, y algunas de las incertidumbres que afectan a nivel mundial, como las elecciones de EEUU, se han disipado". Por este motivo, sostuvo que, para 2025, "las empresas deben seguir evaluando la opción de OPV como una alternativa atractiva para todos aquellos negocios que tengan una proposición de valor y crecimiento que vaya a resultar atractiva para el mercado".
Cuando canceló su salida a bolsa, Europastry alegó que la situación geopolítica internacional, principalmente en Oriente Medio, estaba produciendo "una profunda inestabilidad en los mercados". No obstante, fuentes cercanas a la operación confirmaron a El Confidencial que tomó esa decisión debido a la floja demanda que recibió por parte de los inversores. Fue la segunda vez que se veía obligada a suspender su salto al parqué en menos de cuatro meses y ahora parece que desiste definitivamente.
Tuvo dificultades para captar el interés de los potenciales inversores, con los que mantuvo conversaciones durante una semana y media
La compañía tuvo dificultades para captar el interés de los potenciales inversores, con los que mantuvo conversaciones durante una semana y media. Solo había encontrado predisposición en el mercado para adquirir acciones en la parte baja del rango, que en el folleto remitido a la CNMV se había estipulado entre 15,85 y 18,75 euros, otorgándole una valoración máxima de 1.570 millones.
Uno de los motivos que le llevaron a explorar su salida a bolsa fue facilitar la salida a MCH Private Equity Investments, que controla el 20% del capital desde 2011. Este fondo de capital privado ya da por concluido su periodo de inversión y pretendía poner en el mercado todas sus acciones, aunque tras fracasar el debut bursátil y alejarse ahora la posibilidad de un nuevo intento, tendrá que tantear otras opciones para dar por satisfecha su trayectoria en Europastry.
Europastry tenía previsto salir a bolsa el pasado 10 de octubre, pero canceló la operación solo dos días antes. En el comunicado de renuncia manifestó su intención de volver a intentarlo "cuando la situación de los mercados lo permita". Sin embargo, la empresa catalana de masas congeladas está revirtiendo los pasos que dio para dar el salto al parqué, alejando la posibilidad de realizar una nueva tentativa para empezar a cotizar.