Sánchez y Scholz pugnan estos días por un megacontrato de submarinos de 6.000 M en India

Dos líderes socialdemócratas que suelen trabajar codo con codo en la Unión Europea medirán su capacidad de influencia y negociación a finales de este mes de octubre en India, donde van a competir severamente por un gigantesco contrato de submarinos. El canciller alemán, Olaf Scholz, desembarcará en Nueva Delhi este jueves 24, y saldrá del país justo cuando su homólogo español esté aterrizando. El presidente Pedro Sánchez llegará el domingo 27 a Vadodara, en el centro del país, para reunirse allí con el primer ministro, Narendra Modi, y después viajar a Bombay.

Ambos persiguen un mismo objetivo: conseguir para sus empresas el contrato para la adquisición de seis submarinos convencionales de última generación por un importe de hasta 7.200 millones de dólares (unos 6.600 millones de euros). La cantidad es equiparable a la del famoso contrato del AVE a La Meca, que se llevaron las compañías españolas compitiendo, entonces, con las francesas. En la recta final de la competición naval solo quedan dos rivales, los astilleros públicos españoles Navantia y el poderoso grupo alemán Thyssenkrupp Marine Systems (TKMS), ambas en consorcios con empresas locales.

Los alemanes de TKMS se buscaron un aliado de peso indio, los astilleros estatales de Mazagon Dock Limited. Navantia hizo otro tanto asociándose con Larsen & Toubro, el gigante indio de la ingeniería y una de las mayores empresas privadas del país. Con su socio local cumplían los requisitos de Proyecto 75-I, el programa de adquisición de submarinos del Ministerio de Defensa indio, que debería adjudicárselo a una de las dos propuestas a principios del año próximo.

En este baile diplomático, Sánchez irá acompañado de su esposa, Begoña Gómez, cuyo programa paralelo de actividades incluye una visita a la Reliance Foundation, que encabeza Nita Ambani, filántropa y esposa del que es considerado como el hombre más rico de Asia, Mukesh Amban, según reveló The Diplomat in Spain.

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¿Cuánto aguante sin respirar?

Desde un punto de vista técnico, la Marina de guerra india tomará una decisión en función cuál de las dos opciones ofrezca el sistema de Propulsión Independiente del Aire (AIP, según sus iniciales en inglés) más fiable. Este innovador mecanismo permite a un sumergible convencional navegar hasta tres semanas sin tener que emerger cada dos o tres días para recargar sus acumuladores. No permite la autonomía total que da la propulsión nuclear, pero mejora considerablemente la de sus pares diésel/eléctricos, que apenas pueden permanecer unos días sin emerger.

"Ninguna de las dos empresas pudo presentar" durante las pruebas efectuadas "un AIP probado del tamaño y la capacidad que la Marina india requería" en su licitación, publicó el diario digital The Print de Nueva Delhi citando fuentes del sector de la defensa. "Aunque los parámetros del AIP de Navantia se acercan más a los requisitos de la Marina", precisaron las mismas fuentes.

El primer submarino español equipado con esta tecnología, desarrollada por la atribulada Abengoa, será el tercero de la serie S-80, el Cosme García S-83, que no saldrá del astillero de Cartagena hasta 2026 para su entrega a la Armada. A los oficiales indios que viajaron en junio hasta las instalaciones de Navantia para hacerles una demostración lo más parecida posible con un prototipo, mezcla de sistema terrestre y embarcado, se les recordó que el AIP ya cuenta con el aval de la Armada española.

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K.A.P.

Los alemanes de TKMS sí cuentan con un AIP operativo, pero para submarinos del Tipo 214, más pequeños que los que la Marina india tiene la intención adquirir. Deberán, por tanto, desarrollar uno más grande y rediseñar el submarino en el que vaya a instalarse. Esto llevaría los plazos germanos más allá de los que estima Navantia (si no hay más retrasos, algo que ha sido una constante en el programa S-80+). A partir de la firma del contrato se calcula, del lado español, que todos los submarinos serían entregados en el plazo de diez años.

A favor y en contra

Al margen de estos aspectos técnicos también cuenta, en una decisión de estas características, la vertiente política. Para ir ganando puntos, el pasado 16 de octubre, el Gobierno alemán aprobó Focus on India, un documento sobre cómo ahondar la relación con el país más poblado del planeta en los próximos años.

Scholz concluirá su visita en Goa, donde la fragata naval alemana Baden-Württemberg y el buque de apoyo al combate Frankfurt am Mein exhibirán su fuerza en una escala programada en el marco del despliegue indo-pacífico que lleva a cabo la Marina alemana. Además, Alemania es el principal socio comercial de la India en Europa (sus intercambios triplican a los de España) y el país cuenta con más de 1.800 empresas activas en el país asiático, generando miles de trabajos, frente a las 230 españolas.

A favor de Sánchez, España tiene un largo recorrido con India en el ámbito militar. Hace dos años, Narendra Modi puso la primera piedra de la planta de fabricación en Vadodara, en el Estado de Gujarat, del avión de transporte militar C-295, diseñado y fabricado por Airbus en España.

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El Gobierno indio anunció el fin de semana, en un comunicado, que "Modi, junto con Sánchez, inaugurarán el ambicioso proyecto de Airbus en Vadodara". "Esta iniciativa Make in India está diseñada para promover la fabricación autóctona de aviones", añadió. La Fuerza Aérea india ha encargado 71 aviones C-295 de los que 40 se producirán en esa planta.

Otra baza que juega a favor de Navantia es que su rival alemana TKMS está en negociaciones avanzadas para ser vendida a la empresa de capital riesgo estadounidense Carlyle Group. Aunque el Estado alemán seguiría, probablemente, siendo un accionista minoritario, no está claro que las autoridades indias deseen tener como socio a una compañía de EEUU.

Los monzones de finales de agosto anegaron parte del Estado de Gujarat y causaron 28 muertos. El comunicado del Gobierno indio precisó que el Ayuntamiento de Vadodara (VMC) estaba trabajando "incansablemente" para reparar los daños dejados por las inundaciones ante la visita de los dignatarios.

Tras firmar en el palacio Lakshmi de Vadodara varios memorándums con Modi, Sánchez concluirá su viaje en Bombay, la capital económica del país. Allí presidirá una reunión en la que participarán los empresarios españoles que le acompañarán en su viaje con hombres de negocios indios. Mientras la economía de China tiende a estancarse, la India está experimentando un fuerte crecimiento económico del 8,2% en 2023 y, se espera, del 7,1% este año.