La solución vasca para Talgo empuja a Criteria Caixa a entrar como 'socio financiero'
Sidenor y el Gobierno vasco se convierten en la única solución industrial para el fabricante de trenes. El holding de la Fundación "la Caixa" gana enteros por encima de la SEPI para cerrar la operación
Talgo ha encontrado una solución vasca a sus necesidades de capital, tras fallar ‘la opción húngara’ y rechazar ‘la alternativa checa’. Sidenor emerge como el único candidato a comprar el fabricante de trenes. Y necesita socios. El Gobierno vasco es el claro aliado para respaldar el proyecto industrial de la empresa de Basauri. Según fuentes conocedoras, esta alternativa reclama más aliados, con Criteria Caixa como principal candidato a asumir el papel de ‘socio financiero’.
Sidenor no se ha puesto en contacto con el holding de la Fundación "la Caixa". Los conocedores de este proceso esperan que el encargado de hacer esa gestión sea el propio Gobierno central que necesita que salga la operación sin tener que recurrir a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). El papel del Ejecutivo en esta operación es "acompañar y ayudar", según el ministro Carlos Cuerpo, para que Talgo encuentre "una solución viable a largo plazo".
El Gobierno deberá activar la opción Criteria porque el holding no se mueve de forma proactiva con Talgo desde finales de julio. Criteria Caixa supedita su hipotética participación a la aparición de este socio industrial, como es Sidenor, y que debe ser el encargado de liderar la operación. Criteria acumula en este 2024 importantes inversiones como Colonial, Telefónica, ACS y Puig. Esta misma semana, el holding ha anunciado una desinversión en su empresa de parkings Saba, cercana a los 1.000 millones, y que le permitiría moverse en Talgo con mayor liquidez.
Un asunto diplomático
El déficit de capacidad de la fábrica de Talgo es un asunto que afecta a las relaciones diplomáticas de España. El mayor pedido que tiene en cola es de la empresa ferroviaria alemana Deutsche Bahn (DB), cuyo accionista mayoritario es el Gobierno de Alemania.
Talgo tiene ahora mismo el mayor pedido de la historia de DB, consistente en 56 trenes por un importe de unos 1.400 millones de euros. También están los ocho trenes intercity al operador ferroviario público de Dinamarca, Danske Statsbaner (DSB), otros ocho trenes a Renfe y 10 trenes de alta velocidad a la compañía ferroviaria privada francesa Le Train.
Necesidades de los dueños
Otro de los problemas de Talgo es que sus grandes accionistas quieren salir. La instrumental Pegaso, dueña del 40% de la compañía, está controlada por el fondo estadounidense Trilantic, Torreal (sociedad de inversión de la familia Abelló) y la familia Oriol. Todos ellos buscan la mejor oferta y, para adquirir esa participación, se necesita lanzar una oferta pública de adquisición por la totalidad.
Por ello, Sidenor no descarta lanzar una oferta por la totalidad de las acciones de Talgo, una operación que podría rondar los 500 millones, tal y como evoluciona la acción de la compañía esta semana. El valor bursátil del fabricante de trenes sube un 15% desde el pasado viernes y ya cotiza en los 3,84 euros. El precio está todavía lejos de los 5 euros que puso sobre la mesa el consorcio húngaro Ganz Mavag en una opa vetada por el Gobierno a finales de agosto por una cuestión de seguridad nacional.
Por ello, Sidenor no cierra la puerta a una compra parcial si el precio no encaja o no aparecen más socios. La siderúrgica de Basauri aspira a un mínimo en Talgo del 29,9%, por el que no tendría que lanzar una opa por la totalidad. Una operación que, aun así, ronda los 150 millones para esta solución vasca y donde Criteria Caixa tiene un papel clave.
Talgo ha encontrado una solución vasca a sus necesidades de capital, tras fallar ‘la opción húngara’ y rechazar ‘la alternativa checa’. Sidenor emerge como el único candidato a comprar el fabricante de trenes. Y necesita socios. El Gobierno vasco es el claro aliado para respaldar el proyecto industrial de la empresa de Basauri. Según fuentes conocedoras, esta alternativa reclama más aliados, con Criteria Caixa como principal candidato a asumir el papel de ‘socio financiero’.