BBVA traslada al mercado que la absorción del Sabadell afectaría a muy pocas pymes
El banco azul muestra a analistas, inversores e instituciones la estimación de que solo el 1,5% de las pymes españolas trabajan únicamente con BBVA y Sabadell, y el 3,6% en Cataluña
BBVA está rearmando su estrategia en la opa hostil al Sabadell para colocar mensajes en el mercado, y que lleguen a los inversores y a las instituciones públicas. La entidad ya está mostrando en reuniones y presentaciones privadas que el argumento del banco catalán y del Ministerio de Economía sobre los riesgos de la operación para las pymes no se sostiene, según fuentes del mercado. Desde BBVA no hay comentarios.
El mensaje parte de un cálculo que se ha realizado en el entorno corporativo de la sede de BBVA en Las Tablas a partir de la base de datos Sabi Informa, con 154.000 pymes que reportaron sus datos de facturación y que no superan los 50 millones, umbral que fija el Banco de España y la Comisión Europea para definir a las empresas como pymes.
Estas pymes trabajan con una media de 1,8 entidades financieras. BBVA tiene como clientes al 28% y Sabadell al 25%. Sin embargo, según el mensaje que traslada BBVA con estos cálculos, apenas hay solapamiento. Solo el 1,5% de pymes españolas de la muestra trabaja únicamente con ambos bancos, porcentaje que aumenta al 3,6% en Cataluña.
La muestra solo incluye a las pymes que han registrado datos en la plataforma, lejos de los casi tres millones de empresas de este tamaño que hay en España, y con facturación de hasta 50 millones. Para BBVA es un ejemplo que cuestiona el problema de competencia al que aluden Banco Sabadell o el ministro Carlos Cuerpo, así como la nueva asociación de accionistas minoritarios de Banco Sabadell o los gobiernos regionales de Cataluña y Comunidad Valenciana, que también se han opuesto.
Si se produjera la fusión, BBVA superaría en cuota de crédito a pymes a Santander (23%) y a CaixaBank (21%), pero sin alejarse mucho, al llegar al 24%, según las estimaciones que traslada al mercado. El banco presidido por Carlos Torres quiere combatir la idea que se ha instaurado de que hay un riesgo para la competencia y que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) irá a la segunda fase, alargando el proceso y aumentando la probabilidad de que haya compromisos o exigencias (remedies) más severos.
El propio Onur Genç, consejero delegado de BBVA, aseguró este miércoles que las estimaciones de plazos siguen siendo buenas y que es probable que la CNMC apruebe la compra en la fase uno, en un periodo de cinco a seis meses, aunque ya se han consumido cuatro y su presidenta, Cani Fernández, explicó por qué el proceso es largo la semana pasada en el Congreso. "Estamos convencidos de que la operación debería aprobarse en fase 1, porque no hay problemas de competencia", aseguró Genç en un encuentro organizado por Bank of America.
"Estamos convencidos de que la operación debería aprobarse en fase 1, porque no hay problemas de competencia"
Hasta ahora, Sabadell, el ministro Cuerpo y otras instituciones han alertado del riesgo de la fusión, si se produce, para las pymes, en la medida en que tendrían una ventanilla menos a la que acudir para solicitar financiación, ya que suelen trabajar con varios bancos, tanto en servicios como en financiación.
Otro cálculo, en este caso de un estudio de FRS Inmark, apunta a lo contrario de lo que está trasladando ahora BBVA, reforzando la preocupación que transmite Sabadell al mercado. En este caso, muestra que el 22% de pymes de entre dos y 10 millones de facturación trabaja con ambos bancos, y el 31% de las empresas que facturan entre 10 y 100 millones. En Cataluña, los porcentajes aumentan hasta el 38% y el 52%, respectivamente. Asimismo, Sabadell siempre recuerda que tres de cada cuatro empresas en Cataluña son clientes, y en torno a dos de cada tres en el arco mediterráneo.
BBVA está rearmando su estrategia en la opa hostil al Sabadell para colocar mensajes en el mercado, y que lleguen a los inversores y a las instituciones públicas. La entidad ya está mostrando en reuniones y presentaciones privadas que el argumento del banco catalán y del Ministerio de Economía sobre los riesgos de la operación para las pymes no se sostiene, según fuentes del mercado. Desde BBVA no hay comentarios.