La cumbre en l’Empordà entre Sandro Rosell y Joan Camprubí para hacer caer a Laporta
El mundo del dinero encierra claves de poder y de intereses que explican el sentido de muchas operaciones y movimientos. Ibex Insider ofrece pistas para entender a sus protagonistas
Este verano cenaron en la masía de Corçà que tiene Sandro Rosell, en el Baix Empordà, el expresidente blaugrana con el socio de Boston Consulting Group Joan Camprubí Montal; biznieto del histórico presidente del club, Agustí Montal, y principal aspirante a liderar la oposición a Joan Laporta en el FC Barcelona. Fuentes conocedoras del encuentro explican que ambos coincidieron en que la situación financiera del club es crítica, pese a que La Liga lo mantenga con respiración asistida, y que puede estallar en cualquier momento.
Antes del verano, la delicada situación económica del Barça era la principal preocupación del empresariado catalán. Después del verano lo sigue siendo, a pesar de que Joan Laporta haya dado una rueda de prensa triunfal solo porque el equipo ha ganado cuatro partidos, cuatro, en el arranque liguero.
De hecho, en este encuentro con los medios el propio Laporta sacaba pecho de que cerrará las cuentas de 2023-24 con "resultados operativos positivos". El club cerrará con pérdidas fruto de la frustrada operación de Barça Media, que en las cuentas del pasado ejercicio se valoró en 408 millones y que ahora no se sostiene por ningún lado.
Barça Media, ahora Barça Visión, es un activo que se puso en valor por unas transacciones que se han frustrado, una salida a bolsa fracasada y unas expectativas sobre el mercado de las NFT cuyos precios se han hundido en el último año. Quedan pendientes 160 millones de pagos. Y el plan de Laporta de compensar eso con el prorrateo de una parte del nuevo contrato que intenta cerrar con Nike no parece realista.
En la cena, Rosell y Camprubí acordaron que lo mejor sería promover una moción de censura contra un Laporta debilitado por las múltiples deserciones que ha vivido su junta y su equipo directivo. Pero para impulsar la misma había que esperar a que se vuelva a jugar en el Camp Nou, ahora en obras encargadas a la empresa turca Limak. Es decir, una posible acción de los opositores quedaría aplazada hasta principios del año que viene.
En Montjuic acuden unas 30.000 personas a cada partido, de las cuales la mitad son turistas. Con esas cifras, Laporta podría ganar la moción de censura con una mínima movilización de sus partidarios porque la misma se votaría en un día de partido.
Para ello también sería necesario un contexto futbolístico diferente al actual, es decir, en el que el FC Barcelona no fuese el líder de La Liga. El socio de la entidad catalana es muy futbolero, y la marcha del primer equipo es el verdadero termómetro del malestar en el seno del club. Eso pesa más que cuestiones como el calendario de las obras del Camp Nou —Limak está cumpliendo— o la evolución del rating de la deuda —sigue situado en BBB a fecha del pasado mes de junio—.
Sandrismo versus Cruyffismo
Laporta está apoyado por el sector cruyffista de los socios, que vinculan un estilo de juego desacomplejado con la independencia de Cataluña y las históricas victorias de la era Messi.
La reunión en Corçà demuestra que Camprubí necesita apoyarse en el "sandrismo". Rosell, a su manera, también es popular, aunque no tanto como Laporta. Rosell ha heredado buena parte del nuñismo resultadista a muerte y equivalente a los "piperos" del Bernabéu, pero con un toque independentista "ma non troppo" que aporta el propio Rosell. Sandro Rosell igual se muestra como una víctima de la "Operación Cataluña" que coquetea con la idea de presentarse a la alcaldía para aglutinar el antiguo voto convergente que respalda a Xavier Trias.
Cualquiera que quiera derrotar a Laporta necesita el apoyo del "sandrismo"
Sandro Rosell no se presenta a las elecciones al FC Barcelona y, de manera formal, no forma parte de la oposición. Pero está claro que dentro de la miríada de opositores a Laporta, su apuesta personal es Camprubí.
En el equipo de Camprubí están Joan Roca, el hijo de Miquel Roca y socio de Roca Junyent Abogados; el empresario Jordi Roche, sandrista de primera generación; el exdirector de la Federación Catalana de Fútbol; Evarist Murtra, quien siempre ha influido entre bambalinas en la vida del club; Sam Judez, directora general de DDR Publicidad; la abogada Marta Pasqual; el empresario Ramon Termens (Taurus), Carlos Gallofré, director de Sagax España, o Miró Molins, socio de Collins Patrimonios, entre otros.
Los otros opositores
Pero hay más candidatos a presidir el club. El más rocoso es Víctor Font, editor del diario Ara, que ya perdió las últimas elecciones contra Laporta. También el creador de Bizum, Jordi Termes. O el economista Marc Ciria. Esta dispersión favorece la continuidad de Laporta tanto o más como que el equipo lidere La Liga. Más allá del respaldo de Sandro Rosell, Camprubí Montal tiene dos deberes pendientes para sacar adelante su proyecto: unificar toda esta oposición dispersa y presentar un modelo de club que permita reducir la deuda: 1.300 millones vinculados directamente al club más los 1.500 millones en bonos de Goldman Sachs que financian las obras del estadio. Y también cruzar los dedos para que la crisis del club no se precipite antes de que los opositores presenten su moción de censura.
Este verano cenaron en la masía de Corçà que tiene Sandro Rosell, en el Baix Empordà, el expresidente blaugrana con el socio de Boston Consulting Group Joan Camprubí Montal; biznieto del histórico presidente del club, Agustí Montal, y principal aspirante a liderar la oposición a Joan Laporta en el FC Barcelona. Fuentes conocedoras del encuentro explican que ambos coincidieron en que la situación financiera del club es crítica, pese a que La Liga lo mantenga con respiración asistida, y que puede estallar en cualquier momento.
- La crisis del Barça y el despertar del empresariado catalán para acabar con Laporta Marcos Lamelas. Barcelona
- Laporta da más peso a su consultor externo Toni Cruz al meterle en el consejo de Barça Studios Carlos Rodríguez
- Lluís Prenafeta se acerca al Barça de Laporta en medio de la crisis económica del club Marcos Lamelas. Barcelona