¿Qué hace Shein vendiéndote camisetas con versículos de la Biblia? Dios está de moda

La sudadera más vendida ahora mismo en Shein es un básico. Un típico hoodie que se encuentra en todas las tiendas de ropa. Ancha, con capucha, monocolor, estampado grande atrás y un logo algo más pequeño delante, todo en inglés. Pero hay algo que la hace diferente al resto, su texto no es algo casual o un mensaje sin sentido. Es un versículo de la Biblia. "Fe sobre el miedo. Salmos 118:6: Dios está a mi lado, no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?". Y no es el único producto de la web que alude a textos sagrados.

La prenda forma parte de la colección de Shein dedicada a la Generación Z, Shein EZwear. Un espacio de este monstruo de la ropa en la que entre tops negros, pantalones anchos o mallas, ahora muestra decenas de camisetas y sudaderas pintadas con frases como "Jesús te ama", "Confía en Dios" o versículos del Evangelio según Isaías. ¿Qué hace la tienda que intenta desbancar a Zara vendiéndote una camiseta con un guiño a la parábola de la oveja perdida? La explicación es la misma que puede tener cualquier tendencia: Dios tiene tirón como icono cultural.

"Puede llamar la atención a primera vista que una tienda como Shein tenga algo así, pero cuadra a la perfección con lo último que hemos ido viendo en internet. El boom del cristianismo en la red es muy claro y solo hay que echar un ojo a toda la cultura que ha surgido en los últimos tiempos con guiños continuos al cristianismo", comenta Janira Planes, experta en tendencias en redes sociales, memes y cultura de Internet. "Es cierto que todo ese tirón más que centrarse en tradicionalismo y religión, que también, ha crecido sobre todo como fenómeno pop y se ha alimentado con un activismo que ha creado fuertes comunidades online", añade.

Lo que cuenta Planes, sobre todo, se ha visto en Estados Unidos. Allí es posible encontrar decenas de páginas que además de evangelizar y mostrar su contacto con Dios venden todo tipo de merchandising y tienen miles de seguidores en redes sociales. Un buen ejemplo es el de la marca I Need God, creada por un grupo de jóvenes católicos que conectaron por la red y han montado una especie de plataforma de propaganda religiosa que mezcla la palabra de Dios con mensajes subversivos y memes. Tienen casi 200.000 seguidores en Instagram a los que venden camisetas que dicen "Dios me ama y no puedo hacer nada" o un bikini con la Santísima Trinidad impresa. Otra marca con una inspiración similar es Praying.

"Shein lo único que hace es aprovechar este tirón. Vamos, es lo que hace siempre. Ve lo que funciona, se adapta, lo coge y te lo coloca también", añade Planes. "Da bastante igual lo que funcione, lo importante es que venda y que la tienda pueda sacar rédito de ello". Desde El Confidencial nos hemos puesto en contacto con Shein, para saber más sobre esta colección de prendas y aseguran que "Shein está comprometida con la inclusión y con empoderar a sus clientes para que se expresen libremente a través de la moda. Nuestros productos están diseñados para reflejar y celebrar la individualidad de cada cliente, asegurando que todos los que compran se sientan reconocidos, incluidos y valorados".

Es fácil encontrar ejemplos en los que se pueda haber inspirado Shein, como la marca His Flame, que vende unas sudaderas muy similares a las de la tienda china o la propia web de Etsy. Un e-commerce donde cualquier diseñador puede subir sus inventos y venderlos por todo el mundo. En esta web puedes encontrar diseños que parecen casi calcos de los de las tiendas chinas. Porque además de Shein también puedes encontrar estos objetos en AliExpress o Temu.

Pero las marcas con motivación cristiana llegan incluso a la NBA. Jonathan Isaac, jugador de los Orlando Magic es el creador de Unitus, una marca que vende las primeras zapatillas de baloncesto con motivos cristianos.

¿Quién gana con el Dios digital?

El tirón del cristianismo digital es claro, pero no todos los expertos piensan que sea algo inocuo, sino que puede responder a una tendencia más amplia que se mueva hacia el tradicionalismo. Praying, por ejemplo, tiene una sudadera dedicada a Melania Trump que juega, como de costumbre en todas estas marcas, entre lo subversivo y lo conservador.

“En periodos de caos, en los que se pierde la fe en las estructuras sociales y caemos en el nihilismo, la moda irónica puede verse como una vía de escape o una manera de rebelarse en una sociedad que no hace nada para solventar la desesperación y las injusticias”, explicaba la periodista experta en moda Brenda Otero en un artículo sobre Praying en Vogue.

“La ideología reaccionaria se ha posicionado como una opción subversiva, con las claves estéticas que la acompañan. Es el caso de la escena neoyorquina de Dimes Square, en la que influencers y prescriptores de estilo que escuchan el pódcast Red Scare [que se ha asociado a la nueva derecha] llevan camisetas de la marca Praying con eslóganes pseudoreligiosos o de roles de género tradicionales, pero están conectados con organizaciones que reciben financiación de ideólogos neoliberales”, añadía.

"Obviamente hay una conexión con las posturas tradicionalistas y conservadoras que triunfan en redes como TikTok. Creo que hay una relación obvia, pero el fenómeno tiene muchas más lecturas", comenta Janes. "Creo que también conecta con otras tendencias de la red como el llevar a lo analógico lo que más te mueve en el mundo digital. Solo hay que ver el caso de Taylor Swift", añade. "Es curioso porque son fenómenos que nacen online, pero ante lo efímero de todo lo digital necesitan de lo analógico para apuntalar sus pasiones", termina.