A subasta el Mercedes del trabajador de banca y subastador de arte que estafó 6 M en Navarra

Una treintena de navarros no olvidará el nombre de una persona: José Manuel Alberto Tejada Salvatierra. El extrabajador de banca y subastador de arte fue condenado por estafa tras recibir en torno a seis millones de euros para invertir en arte, ya que contaba con una sala de subastas, o en depósitos y otros productos financieros tras su experiencia en banca... y ahora los tribunales siguen subastando sus activos para recuperar parte de los casi 6,3 millones de euros que se le reclaman.

En concreto, la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Navarra ha sacado a subasta uno de sus vehículos. Se trata de un Mercedes Viano del año 2011 que admitirá pujas hasta el próximo 8 de agosto a las 18:00 horas y que ha sido tasada en 5.100 euros. No obstante, en el edicto de convocatoria de la subasta no se da más información sobre el estado del vehículo u otros datos de interés más específicos.

La subasta ha suscitado interés, puesto que faltando todavía muchos días para su conclusión ya cuenta con pujas. En concreto, la Mercedes Viano ha recibido distintas ofertas y, de momento, el precio ofrecido más alto ha sido de 5.712 euros. Esta cifra está por encima del valor de subasta, lo que hará que se adjudique el bien, puesto que "si la mejor postura fuera igual o superior al 50% del valor por el que el bien hubiere salido a subasta, el/la letrado/a de la Administración de Justicia responsable de la ejecución, mediante decreto, el mismo día o el día siguiente, aprobará el remate en favor del mejor postor".

Este coche ha salido a subasta tras condenar la Audiencia Provincial de Navarra a José Tejada Salvatierra a ocho años y medio de cárcel por un delito continuado de falsedad en documento mercantil y de estafa agravada, tras ser declarado culpable de haber estafado 6,5 millones a una treintena de clientes y allegados. Lo hizo con la contratación de productos financieros ficticios, como la compra de deuda pública y préstamos para la adquisición de obras de arte.

Además, la Audiencia Provincial de Navarra condenó a Bankinter, entidad en la que era agente financiero, como responsable civil subsidiario, quedando otros bancos en los que trabajó, como Bankoa o Sabadell, absueltos.

José Tejada Salvatierra creó distintas empresas que sellaban acuerdos de colaboración o agencia con los bancos, como hizo con Bankinter y Crédit Agricole Bankoa. Así, y dada su experiencia y trabajo en estos bancos, "aprovechando la confianza que esa actividad generaba, y al figurar frente a terceros como agente financiero de Bankinter, consiguió que un buen número de personas le confiaran importantes cantidades de dinero, en la esperanza de que se invirtieran realmente con la finalidad de obtener una rentabilidad".

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Tejada Salvatierra llegó a esta situación, principalmente, por la mala marcha de la sala de subastas que adquirió hace décadas: Subastas Appolo SL. La compañía, que contaba con un establecimiento en Bilbao, fue trasladada a Pamplona para frenar los números rojos al rebajar sus gastos, pero la situación no cambió y el empresario se vio obligado a buscar vías de financiación alternativas.