La banca se embarca en una guerra comercial para crecer y defender sus beneficios récord

Los bancos quieren defender sus márgenes y seguir marcando nuevos récords de beneficios, y para ello necesitan crecer. Por eso, aunque sacrifiquen puntos en la rentabilidad media por cliente, ya pelean por arañar cuota de mercado ante las expectativas de una recuperación del crédito, sobre todo en hipotecas.

Las entidades solo han necesitado desviar a los clientes conservadores de los depósitos, como había ocurrido en el pasado, a fondos de renta fija y otros productos fuera de balance para no trasladar la subida de tipos al pasivo y, mientras, repreciar la cartera de crédito por las hipotecas y préstamos a tipo variable y la nueva producción con costes más elevados.

Entre 2022 y 2023, la subida de tipos del Banco Central Europeo (BCE), que llevó el euríbor desde el -0,5% hasta más del 4%, permitió a la banca una explosión de márgenes que ha mantenido hasta el segundo trimestre de este año, por el decalaje en la repreciación de muchos préstamos. Las mejoras de eficiencia maximizaron este repunte de ingresos hasta beneficios récord.

Sin embargo, el aumento del margen de clientes, que es la diferencia entre el rendimiento de la cartera de crédito y el coste de los depósitos, ya da signos de agotamiento. En varios bancos se ha frustrado y, entre abril y junio, se congeló o disminuyó. Esta evolución llevó al vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, a advertir de que la rentabilidad de la banca ha tocado techo.

TE PUEDE INTERESAR

La banca contradice a Guindos y promete más rentabilidad y nuevos récords

Óscar Giménez

Los bancos españoles no lo ven así, y están embarcados en una incipiente guerra comercial para crecer. Con la particularidad, además, de que se produce en medio de una opa hostil del tercer banco por cuota en España sobre el cuarto. Los competidores saben que, como ha ocurrido en otras operaciones, habrá oportunidades de crecer, porque siempre hay pérdidas de clientes por el camino de las fusiones. Aunque por ahora, BBVA y Sabadell muestran crecimiento y quieren seguir haciéndolo para convencer a los accionistas de la entidad catalana de que sus respectivas propuestas representan la mejor opción.

BBVA aumentó sus cifras de nueva producción de hipotecas en España en un 25% interanual en el primer semestre, con una aceleración hasta el 45% en el segundo trimestre. La caída del stock se está desacelerando y el banco ha modificado su proyección para el conjunto del año de un comportamiento plano a un crecimiento de un dígito.

La caída del 'stock' se está desacelerando y BBVA ha modificado su proyección de comportamiento plano a crecimiento de un dígito

La entidad presidida por Carlos Torres mantuvo su margen de clientes congelado en el segundo trimestre. El diferencial de la clientela se situó en el 3,44%, por una caída en el rendimiento de la inversión crediticia, del 4,35% al 4,3%. Esto responde al descenso del euríbor y a un impulso comercial que se contrarrestó por el descenso en el coste de los depósitos, desde el 0,91% hasta el 0,87%. BBVA, de hecho, anunció esta semana cambios en su organigrama para potenciar el canal de empresas.

Sabadell, el banco que intenta evitar ser opado, también mostró crecimiento en el segundo trimestre. Aunque al contrario que en BBVA, el margen de clientes continuó creciendo hasta el 3,18%, pero ya ha tocado techo o está cerca del mismo, según reconocieron los ejecutivos de la entidad catalana.

Durante los seis primeros meses del año, el stock de crédito aumentó un 0,9% en Sabadell, gracias al impulso de la nueva producción del 14% en hipotecas, del 17% en consumo, del 7% en facturación de tarjetas y del 35% en empresas. Los analistas apuntan a un aumento del margen de intereses de doble dígito en el conjunto de 2024, algo sostenible solo por crecimiento si el margen de clientes deja de crecer.

TE PUEDE INTERESAR

Más que una amenaza: Santander presiona en precios y capta clientes en plena opa hostil

Valor Añadido. Óscar Giménez

El caso más claro de impulso comercial a costa de rentabilidad por cliente es el de Banco Santander. "A río revuelto, ganancias de pescadores", aseguró Héctor Grisi, consejero delegado del grupo cántabro, en la presentación de resultados trimestrales sobre la posibilidad de captar negocio de BBVA o Sabadell si hay fusión.

Es más que una amenaza, porque Santander ha apretado el acelerador para captar negocio ante el repunte del crédito, y España se mantiene como el mercado que más aporta al beneficio. El rendimiento de la cartera de crédito se redujo en el segundo trimestre desde el 4,64% hasta el 4,54%. Por el contrario, el coste de los depósitos subió en el mismo periodo desde el 1,03% hasta el 1,06%. Un estrechamiento del margen de cliente que responde a un impulso comercial. El volumen de préstamos aumentó en el segundo trimestre un 2,6% respecto al primero, hasta los 261.609 millones, mostrando la agresividad comercial del banco.

En CaixaBank también hubo un retroceso del margen de clientes, en este caso de seis puntos básicos, hasta el 3,58%, por una disminución en el rendimiento del crédito desde el 4,62% hasta el 4,59% y un aumento en el coste de los depósitos desde el 0,98% hasta el 1,01%.

Es más que una amenaza, porque Santander ha apretado el acelerador para captar negocio ante el repunte del crédito

La entidad catalana registró una evolución positiva en el volumen de negocio, con un incremento del 6% en los recursos de clientes, hasta los 667.424 millones, y un aumento en el crédito sano del 2,2%, hasta los 351.700 millones. Destaca el incremento del 42,8% en la nueva producción de hipotecas, hasta los 6.648 millones.

Bankinter, como viene siendo habitual en los últimos años, sigue arañando cuota a la gran banca. Unicaja, por su parte, ha entrado en la guerra comercial tras dos años de conflictos internos en el consejo que han afectado al dinamismo comercial de la entidad andaluza. El banco ha registrado en la primera mitad del año un aumento del 7,4% en la concesión de crédito, hasta los 4.131 millones, con un incremento en la cartera de crédito sano del 1,5%, hasta los 48.220 millones. Los recursos de clientes se elevaron un 1,1% interanual, hasta los 89.598 millones.