Los altos beneficios y la mayor presión fiscal disparan los impuestos a las grandes empresas

Hacienda registra un fuerte aumento de la recaudación por los impuestos sobre los beneficios que pagan las grandes empresas. El primer pago a cuenta del impuesto de sociedades en este 2023 se ha disparado hasta los 7.566 millones de euros, desde los 6.105 millones del año anterior, según datos de la Agencia Tributaria.

Este aumento es, si cabe, más notable entre los grupos consolidados, que engloban a la mayoría de las empresas de gran tamaño en España. Solo en el primer pago, a cuenta de los tres que se devengan en el año, la recaudación ha crecido en más de 1.000 millones de euros, lo que supone un incremento del 30%.

Según explica la Agencia Tributaria, este crecimiento de la recaudación se agudizó por el aumento de la presión fiscal que introdujo el Gobierno a las grandes empresas para este 2023 vía limitación de compensaciones. De esta forma, 232 millones de euros se recaudaron gracias al cambio en la forma de compensar pérdidas de las empresas pertenecientes a grupos.

Hasta este año, los grupos consolidados podían compensar las bases negativas de sus filiales con pérdidas con aquellas que tuvieran ganancias. Sin embargo, Hacienda limitó esta compensación al 50% de la base negativa para 2023 y 2024, dejando el resto de dicha compensación para los 10 años siguientes. Es decir, que se trata de un aumento de la presión fiscal para este año y el próximo que será compensado en los 10 siguientes, siendo su efecto neutro al final del periodo, de ahí que la propia Hacienda explicara al presentar este cambio normativo que "no se trata de un incremento fiscal".

Este repunte del pago de impuestos para este año y el próximo ya fue advertido por grandes grupos como MásMóvil, que a finales del año pasado incluyó este factor como un efecto material adverso sobre su posición fiscal. En suma, Hacienda pretende recaudar por esta vía casi 2.500 millones de euros más entre 2023 y 2024 de más de 3.600 compañías.

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No obstante, esto explica alrededor del 3% del crecimiento de los ingresos por el impuesto de sociedades hasta ahora, el resto sigue debiéndose al fuerte impulso que han tenido las ganancias de las grandes empresas. En este sentido, Hacienda recalca que "los mayores contribuyentes siguen siendo del sector bancario y energético".

A los buenos resultados cosechados en 2022, tanto banca como energéticas suman un arranque de año en muchos casos aún mejor. En el primer trimestre de 2022, Santander, Bankinter, BBVA, CaixaBank, Endesa e Iberdrola han aumentado sus beneficios respecto al mismo periodo del año anterior. Todo ello, pese a que el Gobierno aplicó un impuesto sobre estas compañías, por lo que entiende son beneficios extraordinarios debidos a la crisis energética y la subida abrupta de los tipos de interés. Todas ellas han recurrido en los tribunales este nuevo gravamen, que Feijóo (PP) ha abierto la puerta a eliminar si gana las elecciones.

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Pese a lo anterior, Hacienda destaca que "la contribución de algunos de los grandes grupos fue inferior a la de hace un año". Cabe destacar que tanto Repsol como Cepsa, dos de las mayores empresas del país, ganaron menos o directamente reportaron pérdidas, como el caso de Cepsa.

"La base imponible consolidada del impuesto sobre sociedades creció un 26,7% en el primer trimestre de 2023, tasa muy elevada, más si se tiene en cuenta el hecho de que en los dos últimos años ha enlazado fuertes incrementos (35,5% en 2021, aunque este se comparaba con el año 2020, y 20,6% en 2022)", señala la Agencia Tributaria.

Aunque su contribución es mucho menor, también creció con fuerza el primer pago a cuenta de las pymes. Los ingresos crecieron desde algo más de 1.000 millones hasta casi 1.300 millones de euros.