EMPLEO Y FUTURO

El ‘reskilling’, la solución para adaptarse a los cambios del mercado laboral

Por EC Brands
Trabajo de recursos humanos

El World Economic Forum prevé que, para 2025, el 50% de todos los empleados necesitará reciclarse y adquirir nuevas habilidades ante el avance tecnológico

La formación continua de los empleados es imprescindible en un mercado laboral que evoluciona a pasos agigantados. Pymes o grandes compañías, da igual el tamaño: la transformación digital demanda cada vez más capacidades a todos los niveles. Precisamente por eso, el upskilling y el reskilling han pasado a formar parte de la estrategia de muchas empresas. El primero fortalece las competencias para tener mejor desempeño en el puesto de trabajo; el segundo prepara al trabajador para desempeñar otras posiciones dentro de la organización.

Según una encuesta realizada por Statista, más de un 65% de las empresas en España con una plantilla de más de 249 empleados ofertó a sus trabajadores algún tipo de formación en tecnologías de la información y la comunicación. Y la tendencia, de hecho, es la misma en todos los puntos del mapa. Al menos eso reflejan otras dos encuestas llevadas a cabo a nivel global: el 88% de las empresas recualifica a sus trabajadores a través de algún programa de formación y el 75% de los empleados afirma estar satisfecho o muy satisfecho con las formaciones de reciclaje y mejora de habilidades de su compañía.

Principales desafíos de RRHH en 2023

El World Economic Forum prevé que, para 2025, el 50% de todos los empleados necesitará reciclarse y adquirir nuevas habilidades por el avance tecnológico. “Las empresas que no invierten en formación se arriesgan a enfrentar múltiples desafíos en un entorno cada vez más competitivo”, afirma Rita González, directora nacional Randstad Learning. Y es que, según ella, la formación, además de ser “una de las palancas para abordar la escasez de talento”, refuerza el compromiso y la fidelización: “Se ha demostrado que el 74% de los empleados optaría por permanecer en sus empresas actuales si se les brindara oportunidades de formación y desarrollo”. Además, “a la propia corporación le puede suponer un ahorro en atracción desarrollando el potencial de cada trabajador”, añade.

Una estrategia de formación adaptada

A la hora de abordar el proceso de formación en la empresa, pueden surgir muchos interrogantes que, cada empresa, tendrá que abordar dependiendo de sus necesidades concretas: ¿cómo puedo detectar cuáles son las necesidades de formación concretas de cada colectivo? ¿Cuáles de estos conocimientos y competencias van a impactar más en la consecución de resultados de mi organización? ¿Qué metodologías de formación se adecúan mejor a mi ecosistema laboral? ¿Qué formación puedo ofrecer con un presupuesto reducido?

Precisamente, para abordar todo el proceso desde la raíz, Randstad cuenta con un servicio que aborda la gestión de todo el proceso, desde el diseño hasta la puesta en práctica de nuevas competencias y comportamientos “con el fin de conseguir un mayor impacto en el negocio”. Lo hace a través de varios pasos.

Imagen de recurso

En primer lugar, el equipo realiza un diagnóstico de las necesidades de la empresa y de las competencias de los empleados para identificar el modelo de learning que mejor se adapte a los objetivos y se elabora el plan de formación.

Tras la consultoría, y una vez definido el plan de formación, se crean los contenidos ad hoc para la empresa en diversos formatos -desde vídeos hasta webseries- de manera que resulten atractivos y de interés para los empleados. “En este punto, ayudamos a nuestros clientes a alinear las metodologías más idóneas para cada contenido y cada perfil de aprendizaje, porque no todos aprendemos de la misma manera. Nuestra formación puede diseñarse a medida para consumir de forma presencial o virtual, o puede ofrecerse a la plantilla en formato e-learning para el autoconsumo”, explican desde la compañía.

Durante la formación, se realiza un seguimiento exhaustivo de los participantes para mantener vivo su interés y que se sientan acompañados hasta la finalización del curso. “Una vez concluido, medimos los resultados en función de los objetivos propuestos. Esta última fase es clave, porque nos ayuda a medir el impacto que genera la formación en el negocio de nuestros clientes”, aseguran.

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Todo el proceso se lleva a cabo a través de diferentes plataformas tecnológicas. “Comenzamos con Relevate Talent Assessment, un site de evaluación de competencias 100% para identificar las competencias en las que es necesario formar a la plantilla y elaborar un plan de formación ajustado”, apuntan desde Randstad. “Después, con Relevate Learning, nuestro LMS y LXP, los empleados acceden a sus formaciones e-learning y en aula virtual. Se trata de una plataforma totalmente customizable, modulable y disponible en diferentes idiomas y con múltiples aplicaciones que facilitan el aprendizaje y el intercambio de conocimientos, como las comunidades, los foros, la gamificación, itinerarios recomendados, las playlists, etc.”.

Para concluir, Rita González hace una reflexión: “La cultura del dato, la digitalización y la adopción ágil de las tecnologías nos van a permitir impulsar el aprendizaje. Ya que tenemos que ser capaces de estar en modo aprendizaje constante, hagámoslo eficiente, efectivo y con la mejor experiencia posible”.